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everybody has an addition mine happens to be you ✧ ׄ 𑂴
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Chanhee suspira una vez más, luciendo distraído, pensativo, con su mente claramente en otra parte.
Younghoon se mueve en su asiento, tragando el bocado de arroz en su boca. Hecha un vistazo a el rubio frente a él, sabe que está pensando en algo y que no debe preguntar por ello. Conoce a Chanhee desde hace años y sabe perfectamente cuando algo está atormentándolo.
Younghoon recoge otro bocado de comida con sus palillos, observa a su amigo mirar por la ventana del restaurante en lugar de comer su propia cena.
La luz de la tarde en el exterior convierte su perfil en dorado, atrapando sus pestañas de una manera de la que Younghoon no puede apartar la mirada. Uno pensaría que después de casi quince años, estaría acostumbrado a lo irreal que Chanhee se ve literalmente todo el tiempo, pero de alguna manera todavía lo toma con la guardia baja.
Casi han terminado con la cena cuando Chanhee finalmente se da cuenta de lo que le ha estado molestando.
─Hyung.
Younghoon casi se atraganta. Él conoce ese tono, lo conoce muy bien. Él sabe que está en problemas.
No suena a ese "Hyung" en un tono dulce, este es diferente, sabe que quiere algo.
Nunca ha sido bueno para decirle que no a Chanhee, especialmente cuando sabe que tiene la mente o el corazón puestos en algo. Esa voz ha metido a Younghoon en la mierda demasiadas veces en su vida, y aunque Chanhee la usa con mucha menos frecuencia ahora que cuando eran adolescentes, todavía hace que algo en el estómago de Younghoon se retuerza, todavía hace que su ritmo cardíaco se acelere un poco.
─¿Qué?
El rubio apoya su barbilla en una mano, parpadea repetidamente hacia el más alto, sus largas pestañas rozan sus mejillas. ─¿Qué piensas de los niños?
Eso no es lo que Younghoon esperaba, pero tiene que admitir que tiene curiosidad por ver a dónde va esto.
─Bueno, no me desagradan.─dice, dejando los palillos en la mesa y tomando su bebida.─Aún que por supuesto, ya lo sabes.
