𝙄𝙣𝙞𝙘𝙞𝙤

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───── ❝ SUBTERRÁNEO ❞ ─────

La sociedad estaba regida por dos títulos: universitarios y ciudadanos.

Todos nacían siendo ciudadanos, sin importar la familia de donde provenga. A los seis años, agentes de captación hacían exámenes a todos los niños disponibles en busca del 'milagro'.

Un niño prodigio, que tendría la oportunidad de hacerse de un título universitario y terminar siendo millonario. Quién no aprobara estaba condenado a doblarse las espaldas trabajando en fábricas, limpiando casas y en el peor de los casos siendo asesinados por no cumplir órdenes de los amos. 

Ojalá solo fuera eso, pero había algo que hacía del levantarse por la mañana con vida fuera un milagro. 

'Los demonios' 

Criaturas demoníacas, hijos y hijas del mismísimo diablo, que devoraban humanos con tal de satisfacer su hambre. 

Cazaban en las noches, aunque eso no quiere decir que mueran en la luz del Sol, simplemente se hacen más débiles; facilitando su aniquilación. 

Eso era lo otro. 

A los estudiantes que eran preparados para ser universitarios se les exigía como 'pago' ser cazadores de demonios; entregando su vida de ser necesario. Desde el momento de su captación en tierna edad, eran entrenados y considerados hombres y mujeres a quienes explotaban tanto física como mentalmente en terrenos pensados para esto e incluso incluían demonios de pequeños rangos; miles de niños morían a diario. 

Quién tuviera el milagro —o desgracia— de sobrevivir hasta los 16 años comenzaba lo que era la secundaria, donde recibía una base para convertirse en universitario. 

—Por favor, mantengan el orden y silencio para que puedan escuchar atentamente mis palabras. — pidió una mujer de pelo blanco muy hermoso mientras acomodaba su carpeta sobre la madera del podio, la luz del Sol mañanero la hacía lucir angelical, que pena que la mayoría de los estudiantes —tanto mujeres como hombres— con las hormonas revueltas ya la hayan desnudado con la imaginación. 

Algo fastidiada agité la cabeza, sacudiendo mi flequillo rosado sobre mi frente, su charla se demoraba mucho. 

—No sé si muchos lo sabrán, pero está institución es subterránea, ya que fue utilizada la arquitectura de lo que alguna vez fue la estación más grande de Japón. Cuenta con tres pisos, el primero está utilizado por estudiantes de segundo año y tercer, el siguiente será ocupado por ustedes a partir de ahora y el tercero está fuera de servicio, ya que los demonios tomaron esta área y hasta el momento no hemos sido capaces de retomarla. — los murmullos de los estudiantes comenzaron a infestar el aire, el pánico y terror apoderándose de sus cobardes corazones. 

Alcé una ceja, ¿estaríamos viviendo por el próximo curso sobre nuestros peores enemigos? ¿Quién mierda creó está institución? Esainformación no estaba en su panfleto de propaganda que llevo leyendo diez años Había que ser lo suficientemente estúpido cómo para saber que sí ponías a estudiantes una planta por encima de otra que estaba infestada por caníbales; estos se escaparían y devorarían a los futuros universitarios. 

—Discúlpeme, ¿no nos estaría eso guiando directamente a la muerte?. — alzó la voz uno que se creía más valiente que otros, aunque se notaba su temblor en las piernas.

—La institución es consciente de todo esto, se han tomado las medidas necesarias. La tercera planta está completamente sellada, sólo abre para que los jóvenes cazadores entren a cumplir su misión de exterminar, algo que sucede en los turnos de Educación Física.

—¿Nos está diciendo que, luego de pasarnos el día dando clases, debemos bajar a una planta infestada por demonios desde hace siglos para exterminarlos? Ni aunque reunieran a los mejores cazadores sería posible acabar con demonios de miles de años con una fuerza mil veces más grande que la nuestra. Lo siento pero, me opongo a esto y pido mi baja. — lo rápido que había sido al renunciar me sorprendió, de seguro lo planeaba desde que llegó aquí.

SUBTERRÁNEO -MUICHIRO TOKITODonde viven las historias. Descúbrelo ahora