Capítulo 09

345 51 1
                                    


—Se está retrasando —le dijo Neji a Sakura aquella noche, mientras esperaban en las oficinas de Cherry Maiden—. Tal vez deberías llamarla otra vez.

—Sólo han pasado diez minutos. No te preocupes. Ino llegará.

Neji recorrió arriba y abajo el despacho con impaciencia. Miró el reloj por tercera vez en los últimos cinco minutos y se preguntó si realmente era una buena idea que Sakura hablase con su amiga. Tanto Kakashi como la policía ya habían interrogado a la joven y aunque se había mostrado colaboradora no les había proporcionado ninguna pista que llevara hasta su Kabuto. Neji estaba seguro que tanto el detective como la policía verían el hecho de que Sakura hablara con Ino como una intromisión por su parte.

Pero Hinata era su prima, casi su hermana, maldita sea. No podía quedarse esperando a que ellos averiguaran dónde la tenía escondida Kabuto. Porque cuando lo descubrieran tal vez sería demasiado tarde. Sólo pensar que algo malo pudiera ocurrirle a su prima le provocó un nudo en el estómago. Neji trató de mantener el miedo a raya. Se prometió a sí mismo que encontraría a Hinata.

—Neji, Ino llegará enseguida —le aseguró Sakura.

—Eso dices tú.

—Llegará. Sólo espero que aparezca antes de que le hagas un agujero a la alfombra.

Neji se detuvo y se giró para mirarla.

—Intenta relajarte —le pidió ella.

—No puedo —respondió Neji con sinceridad, masajeándose el cuello para intentar aliviar la tensión—. No puedo dejar de pensar en Hinata, en lo asustada que debe estar.

—Lo siento. Ojala pudiera hacer algo.

—Ya lo estás haciendo. O lo harás cuando llegue tu amiga. Si es que llega — aseguró él suspirando al ver la mirada que le dirigió Sakura—. Ya sé que no tengo paciencia. Pero es que Hinata siempre ha dependido de mí. Siempre he estado ahí cuando me ha necesitado y seguramente se estará preguntando por qué no la he rescatado ya.

—La encontrarás —le aseguró Sakura—. A mí me encontraste, ¿no es cierto?

—A ti no te habían secuestrado —puntualizó él.

—En eso tienes razón. Pero no quería que me encontraras y diste conmigo de todas formas.

—No puedo contar con que Kabuto cometa el error de utilizar la tarjeta de crédito —dijo Neji—. Si al menos tuviera alguna idea de dónde podría habérsela llevado, de dónde buscar…

—Intenta no preocuparte. Si Hinata se parece en algo a su primo, entonces es más fuerte de lo que tú piensas.

—Ella no es como yo. Es frágil, desconfiada y…

Neji se imaginó a su prima en una casa abandonada, atada y aterrorizada y a un enloquecido Kabuto amenazándola.

—… Y si ese desgraciado le ha hecho algo, yo…

Terminó la frase maldiciendo entre dientes y se dio la vuelta.

—Lo siento.

—No, soy yo el que lo siento —aseguró Neji pasándose la mano por la cara antes de girarse para mirarla—. No tengo derecho a desahogarme contigo de esta forma.

—Es normal. Me imagino lo que sientes. Si alguno de mis familiares estuviera en poder de un Hyūga yo también estaría furiosa. Sólo espero… espero que tengas razón y que mi charla con Ino sirva para encontrar a Hinata.

—Servirá —aseguró él con firmeza.

Se forzó a pensar en otras ocasiones en las que se había enfrentado a situaciones imposibles y había salido triunfante. Como cuando tomó las riendas de la empresa, que resultó un éxito a pesar de no ser el legítimo dueño y la constante desconfianza de su tío. O en su relación con Sakura, en el amor que compartían y el hijo que iban a tener a pesar de la rencilla histórica entre sus familias. Conseguir que Sakura regresara con él a Tokio aquel día había sido también un gran logro. De acuerdo, todavía no le había dicho que se casaría con él pero aquel era un detalle que solucionaría en cuanto encontrara a Hinata.

Eterna Pasión |Nejisaku| COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora