TENTACIONES

Q U I N C E

Hola, hola.
Cuánto tiempo, ¿eh? 
Bueno, ya esto será más común ya que he mudado todo el escrito a aquí a wattpad, lo que significa que puedo escribir desde donde sea, cosa que no podía ya que tenía todo en mi lap.
Así que espero verlas seguido por aquí.

Estuve leyendo una novela que esta narrada en presente, ésta novela esta narrada en pasado, pero como que se me desconfiguró el cerebro, estoy escribiendo en presenteeeee, pero no debe de ser así. Así que disculpen si se me va el tiempo.

Y...
Resumen de la novela porque  pasó como más de un año y no se va a recordar jaja:

Amelia consiguió un trabajo como recepcionista, su jefe es su ex novio, ex prometido también, así que, ajááá, la cosa está difícil. 
Viajan a otro continente a conocer a los inversionistas.
Amelia anda cansadona, Alexander de insoportable y celoso porque Amelia conoció a un bombón de ojos color azulito super dulce con nombre de Narek:)))
Alexander le invita un café y a Amelia se le mueve el corazón de pollo:((
Amelia despertó en brazos de una muchachona, y no sabe por quééé.
Ése capítulo es para esooo.

¿Me faltó algoo?
Besos en el *

—𝓐

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Varona parte 1

Llegué cansada del último día de trabajo y la última visita a la fábrica anfitriona.
Alexander estuvo insoportable todo el día, omitiendo claro, el café que me invitó. Mandando a todos, gritándonos por cualquier cosa, e incluso humillando a Ximena. Que, por cierto, se veía muy muy cansada, incluso se le inflamó el vientre por el estrés, o es lo único sentido que le encuentro a su vientre inflado como globito de feria.

Cuando tomé el ascensor, me topé con una chica que me hacía sentir incomoda, tenía cara de pocos amigos, vestía comoda de envídia. 

—Putos zapatos asquerosos

Me quedé lo más quieta posible, capaz y estaba molesta y se desquitaba con cualquiera.
Se quitó los zapatos, eran negros, de plataforma, tacón grueso, brillantes de charol, con correa para ajustarse... todo eso lo sé porque casi me dan a mi cuando los aventó a la esquina del ascensor.
Cuando terminó de maldecir, recargó sus puños y frente en las puertas. La blusa blanca aparentemente 2 tallas más grandes, que le quedaba como vestido, con aberturas en cada lado, se alzó y movió, dejando el mini short que tenía, pero sus piernas ejercitadas que fue lo que me  sonrpredió por lo wow que se veían, y obviamente debo de recalcar una de ellas estaba tatuada casi por completo.

Las puertas se abrieron, ella casi cae, algo gracioso que me hace casi sacar una risilla. Pero la verdad es que me sentía intimidada un poco como para reírme en su cara.

Ella se hizo a un lado, yo pasé porque ya era mi piso. Cuando se cerraron las puertas, se me salió una risa de mi, para mi, la sonrisa en mi cara era evidente, incluso ahora sonrió por el recuerdo.

Mi humor había cambiado, quería reír más. Así que, llegando a mi habitación, me desvestí, tomé un baño caliente, tardé 30 minutos en cambiarme porque tenía la costumbre de sentarme en toalla a estar en el teléfono un rato.
Había visto unos letreros en el hotel donde se invitaban a todos los huéspedes a la fiesta nocturna por el aniversario. La suerte es que los letreros estaban en varios idiomas, entre ellos estaba el mío.

Saqué todo lo restante de la maleta, por si tenía algo allí que me pudiera servir. En un compartimiento con cierre grueso, había una falda negra con tiras por dentro que envuelven el muslo. Algo muy sensual a mi parecer. Además, con abertura en un lado. Me gustó como se veía, pero extendida en la cama, tenía miedo de ponérmela.
Busqué más en la maleta por si venía con alguna blusa para formar el conjunto, aunque no recordaba haber empacado eso, lo más seguro es que haya sido idea de mi abuela. Sonreí para mí misma al recordarla. ¿Qué estará haciendo ahora?