- Pareces un niño chiquito, - acusó la chica de ojos impares. - tú me has visto a mi casi sin nada de ropa y tu sigues vistiéndote en el baño. - soltó para hacer que el joven tuviera la misma confianza excesiva que tenia ella con él la misma que él podía tener con ella. -
El enmascarado salió del baño de la habitación con su uniforme escolar puesto mientras la chica estaba sentada al borde de la cama que compartían con los brazos cruzados.
- Te juro por todo lo malvado y ruin de este mundo que tenia los ojos cerrados, - le repitió, por que eso se lo solía decir una y otra vez sin parar. - deja de decir locuras.
Y era cierto, cerró los ojos, los últimos días con este juego de relación y no relación amorosa de la chica lo tenia algo movido.
Cecilia andaba más inseparable de él que nunca y ahora si llegaba a su habitación, no por largos plazos de tiempo pero, si llegaba para pedirle que salieran o para que le ayudará en equis cosa.
Ya tenia en solo retoques su tesis, gracias a eso ya no estaba tan nervioso e intranquilo que hace algunas lunas.
- ¿Quien dice? - lo atacó. - Como siempre tienes la cara tapada no puedo saber si realmente viste o no. - reforzó su idea. -
- Vaya, - contestó. - ahora tu sabes más de mi que yo para afirmar eso.
Demencia ya tenia su uniforme escolar puesto, solo se encontraba esperando a su "amante" a como ella divertidamente lo había apodado.
Sabia que lo que tenían ambos (algo que ella forzó pero, de igual manera no le importaba) era más como ser amigos con derechos pero, al fin y al cabo ella no buscaba eso.
Si queria algo más con él y de no ser por lo molesta que podía ser Cecilia ya estaría con él sin necesidad de mantener todo en secreto.
¿A Demencia le importaba lo que los demás decían de ella?
No.
Pero, con la rosada era algo que por mas que le quería valer mil hectáreas de caca, no podia darle igual lo que ella decía de su persona por que ella influenciaba a su compañero de habitación y eso no le convenia.
Por que la opinión de Flug si importaba y no podia dejar que sus ideas que el tenia sobre ella cambiarán porque de lo contrario no podría estar conviviendo con él.
Era raro tener un sentimiento serio a alguien a quien no le conocía el rostro.
Fue algo extraño un día despertó en esa habitación y sentía que si no era con él, era imposible que durmiera bien, él lograba hacer lo que ninguna droga podría, al inicio lo vio como la respuesta más saludable a su insomnio pero, mientras más avanzaba el tiempo el sentimiento de necesidad fue cambiando.
Quería saber más de él y si podía acurrucarse a su lado se sentia bruscamente feliz.
Cuando eso pasó todo se volvió un huracán mental para ella.
Y la única solución lógica que ella encontró es estar a como esta ahora.
- Si me dejaras saber más de ti y como te ves, así seria. - recalcó, seguiría con lo mismo hasta salirse con la suya. -
- Lo hablamos por la tarde, - se resignó a su suerte, ya era mucho todo esto, aprovecharía su tiempo libre para aclarar esta situación. - tenemos que ir a desayunar para ir a clases. - le recordó. -
Ella no articulo palabra alguna para poner sus ojos en blanco, tal vez esta vez si hablaban de verdad.
Para ella todo era tan fácil, solo actuaba y no pensaba, lo contrario a él que sobre analizaba todo.
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°Amantes de Medianoche° Demenflug
Hayran KurguEn un tiempo no tan lejano al presente cuando tres seres tan extremadamente peculiares como lo son Demencia, la chica de pelo verde, Flug, el chico inteligente que se tapaba el rostro a como diera lugar, Cecilia, la chica rosada y por último y no me...