°Amantes de Medianoche° Demenflug

Capitulo 15

- ¡Esta mierda no sirve! - reclamo al aire la chica sola en su habitación. - ¡Ahí tienen su mierda! - grito más que molesta arrojando un frasco de pastillas por la ventana y seguido escuchar un quejido. -

Parecia que sin querer termino dándole a alguien.

La chica después de una intensa búsqueda logró encontrar alguien que le ayudará con sus problemas de ser atrapada en los brazos de morreo todas las noches, no era lo mejor pero, le ayudo en algo.

Por que después de la visita de señor estudioso rara vez lo veía, así que cero sueño cuando anochecía.

Su viejo dealer estaba en la cárcel así que por mas que quisiera no podia ayudarla con su escasez de somníferos, si encontró otro pero, no era confiable, ya era la segunda vez que el tipo le conseguía las pastillas que no eran.

O probablemente si eran para dormir pero, no eran lo suficientemente fuertes para afectarla, el caso con este dealer es que envés de conseguirle las recetas para que ella misma fuera a conseguir lo que quería, él conseguia las pastillas, lo que hacia que la cagara por que obviamente no sabia que tan fuertes tenían que ser las mismas para que la chica pudiera dormir.

Y dormir de verdad, por que si no eran las que ella usaba terminaba atontada pero, no dormida.

- Maldita sea. - maldijo con bastante enojo. - A la próxima me las voy a quedar para meterselas una por una en el ano. - refunfuño con ganas de patear a cualquiera que pudiera estar frente a ella. -

Habían pasado doce días que estaba en su habitación y ya sentía que era digna de cualquier sanatorio.

Desde antes lo era pero, en estos momentos lo era más.

Su teléfono sono.

Inhalo y exhalo antes de ir por él por que sentia que tenia tanta molestia encima que con solo tocar el pequeño aparato podía destruirlo.

Habia recibido un mensaje de Flug.

"Tengo noticias, sé que no te gustarán pero, igual quiero que lo sepas"

"¿Que me quieres decir"

"Preferiría decírtelo en persona"

"Ok"

Ahora si que valió verga, ya sabia lo que iba a pasar, él se iba a ir.

Ella aún no habia ido por las cosas que había dejado en su habitación, asi que ni modo, le iba a tocar ir por ellas hoy para recibir la tan odiada noticia que estuvo esperando todos estos días.

Arrojo el teléfono a la cama, hoy no iría a clases, no sentia que habia despertado de humor para tratar con gente sin darle un puñetazo en la cara.

Las cosas no podian verse más negras desde su perspectiva, imposible.

- Con que no me agarre de rehén para no irme de aquí, estaremos regularmente bien. - se dijo el así mismo después de ver el mensaje. -

Bien por solo decir que lo estaba.

Habia pasado las pruebas necesarias para ir al campamento pero, todos en administración le advirtieron todo lo que le podía pasar a pesar de haber rendido excelentemente en sus exámenes.

Tenia todo listo en su habitación para entregarla a excepción de las cosas de su ex compañera de cuarto.

A veces por accidente en su mente la llamaba "ex novia" pero, de manera legal nunca fueron novios por que en público los dos no daban ni por cerca señales de ser al algo así.