Una Llegada Inesperada | ♡ NoRen ♡

Capítulo 5

—¿Por qué rayos no me dijiste? ¿Cuándo paso? ¿Le rompiste la cara? Jamás pensé que pasaría—preguntó Chenle sorprendido. Parecía que en cualquier momento iba a caer desmayado.

Le había contado todo a Chenle, porque prefería decírselo él a que lo escuchará de otra persona cuando el rumor se haya expandido.

—Basta ya te lo conté—respondió irritado.

—Lo sé, es solo que aún no lo puedo creer, mi cabeza no lo asimila—dijo Chenle.

—Estaba borracho, si hubiera estado en mis cinco sentidos no me habría acostado con él—dijo con un semblante serio. Frenó al ver a Jeno con Yeeun, ella se acercó un poco más cerca de Jeno cuando se dio cuenta que Renjun los miraba.

—Pues eso lo he estado dudando

—¿Qué quieres decir? —Se giró hacia Chenle mirándolo interrogante.

—Cada vez que Jeno te ve, te come con la mirada. También te mira en clases. —Renjun rio tan fuerte que Jeno volteó a verlo.

—Dios, que buen chiste—felicitó. Chenle se pegó la frente con la palma de su mano.

—No era broma. —Sonrió—. Aquí viene

El castaño se volteó encontrándose con Jeno, este lo miró con un gesto serio. Espera ¿estaba molestó?

—Chenle. —Jeno no terminó de decir cuando Chenle lo golpeó directo en su entrepierna. soltó un gritó ahogado. Renjun rio bajito.

—¿¡Por qué mierda fue eso!?—lloriqueó con las manos en la entrepierna.

—Sabes porqué imbécil—informó antes de irse y dejarlos solos.

—Que agradable es tu amigo—dijo entre dientes tratando de retener las lágrimas.

—Sí, tal vez te lo merecías. —El castaño se encogió de hombros.

—Tenemos que hablar, vamos—habló el pelinegro.

—Tú no me dices que hacer, además tengo clases en diez minutos—informó el castaño con los brazos cruzados

—No me interesa. —Con su mano en la espalda de Renjun lo guío hacia el patio de la universidad. La mayoría de los estudiantes ya habían entrado a clases, así que no se encontraba nadie.

—Siento arruinar tu vida con un hijo— dijo por fin el menor. Sentía que debía disculparse con Jeno. El pelinegro lo miró, pero no dijo nada.

El pelinegro hizo que Renjun tomará asiento para luego el sentarse a su lado.

—No tienes la culpa de nada, no quiero que te disculpes, no arruinaste mi vida—dijo sin dudarlo en ningún momento.

Jeno había pensado en un futuro en tener hijos sí. Pero jamás se imaginó que sería con Renjun. Le atemorizaba que las cosas no funcionarán. Renjun lo odiaba. Al principio el castaño le caía mal por el carácter que tenía y por la forma en que se conocieron, pero luego ese odio se convirtió en algo más y él lo sabía.

—Tengo miedo.

—No tienes por qué tener miedo, voy a estar todo el tiempo contigo. —Renjun levantó su mirada sorprendido. Jeno estaba siendo dulce.

—Gracias—susurró sintiéndose mareado de repente.

—¿Estás bien?

—Eh si—se limitó a decir. Recordó cuando Yeeun estaba cerca de Jeno y le entraron unas ganas de vomitar.

—Odio esto—dijo el castaño con los ojos aguados—. ¿Cómo se lo voy a decir a mi madre?

Sintió pena por sí mismo. Jeno tampoco sabía cómo decírselo a su madre, seguramente Yoona lo tomaría de la oreja y lo regañaría como cuando era niño para luego hablar de cómo sería una gran abuela.

—Puedes esperar hasta ver que las cosas vayan bien con tu embarazo— sugirió. Él haría lo mismo.

—Sí, eso haré. De hecho, tengo una cita en unos días con mi doctor ¿te gustaría ir? dijo tímido mirando hacia otro lugar, sonrió en dirección hacia Donghyuck quien estaba siendo abrazado por Mark. Ellos empezaron a salir desde la fiesta que había organizado Yeeun. Estaba feliz por Donghyuck.

—Claro me encantaría. Podemos ir en mi auto—sonrió en dirección a Renjun cuando este volteo.

—Esto es raro. —Rio poniéndose de pie de frente a Jeno.

—¿El hecho de que estemos hablando y no nos estamos matando? —Renjun asintió—. Estoy de acuerdo contigo.

—Sí, pero no por mucho. Tendrás que soportar mis cambios de humor cabeza hueca. —Sonrió burlón.

—¿A dónde vas?

—A clases tonto—golpeó la cabeza de Jeno.

El pelinegro no se quejó en lo absoluto.