Renjunie: Jeno.Renjunie: JENO.
Jen: ¿Qué pasa? ¿Te sientes bien?
¿Necesitas algo?
Renjunie: Calma me encuentro bien, pero estoy muy aburrido :'(
Jen: ¿Y?
Renjunie: Ugh te odio.
Jen: Era broma
¿Quieres qué te pase a buscar y vemos una película en mi departamento?
Renjunie: Por favor, me muero de aburrimiento.
Jen: En unos momentos estoy allí
Pastelito
Dejó su teléfono en la mesita de noche gruñendo por el apodo. Sabía que Jeno le gustaba molestarle, así que no le tomo gran importancia. Se levantó con pereza y empezó a cambiarse de ropa. Optó por ponerse unos jeans y un suéter azul. Estaba amando esos suéteres, se le hacían muy cómodos. Para cuando terminó de vestirse el timbre sonó.
Bajó las escaleras arreglando su cabello, antes de salir se despidió de su madre. Jeno lo estaba esperando afuera del coche.
—Hola—saludó—. ¿Estabas ocupado? Si lo estabas, lo siento.
—No lo estaba—dijo cansado él pelinegro—. Casi acabo de despertar.
Era lógico, apenas eran las nueve de la mañana, mayormente a esa hora seguía durmiendo, pero se levantaba corriendo a vomitar y luego de eso ya no podía conciliar el sueño.
—Nos vamos—preguntó él pelinegro. Renjun asintió.
Le abrió la puerta a Renjun siendo caballeroso.
Cuando llegaron al departamento del mayor, Renjun se sorprendió un poco por lo organizado y limpio que se encontraba el departamento de Jeno. Y él penas le daban ganas de limpiar su cuarto.
—Tienes un bonito departamento—halagó—. ¿Vives sólo?
—Sí—respondió Jeno—. ¿Quieres algo de tomar?
Renjun negó sentándose en el sillón que se encontraba en la sala, era muy cómodo. Jeno tomó el control remoto tomando asiento a lado del castaño.
—¿Seguro qué no quieres algo? —Renjun lo pensó estirándose en el sillón.
—¿Tienes chocolate? —Sonrió—, muero por uno de chocolate blanco, no mejor helado de galleta—dijo con la boca hecha agua. Jeno rio mirándolo con ternura.
—No tengo helado—El castaño hizo un puchero cuando oyó la respuesta del pelinegro—, pero saldré a comprarlo y de paso voy por una pizza.
—Sí—gimió gustoso y complacido por las atenciones.
Para cuando Jeno volvió de comprar se encontró con un Renjun dormido en el sillón. Dejó las cosas en la mesa ratonera y se hincó al lado de Renjun viendo como dormía. Acercó su mano a la mejilla del castaño acariciándola, inspeccionando las pestañas gruesas que tenía Renjun. El castaño se removió abriendo los ojos, Jeno se alejó por completo.
—Te quedaste dormido—explicó—. Anda a lavarte las manos para que puedas comer.
—Jeno, mi helado—se quejó. El pelinegro sonrió negando con la cabeza.
—Primero, comes adecuadamente y luego puedes comer todo el helado que quieras
—Hablas como mi madre—bufó levantándose.
Luego de minutos ambos se encontraban viendo una película de risa escogida por Renjun. El pelinegro oía como Renjun soltaba pequeñas risas.
—Renjun—llamó.
—¿Qué pasa? —preguntó sin despegar la vista de la pantalla. En sus manos se encontraba el bote de helado.
—Vente aquí—Palmeó su regazo, Renjun lo miró sorprendido—, quiero acariciar tu vientre.
Renjun no rechistó y se subió en el regazo del pelinegro pegando su espalda en el pecho de este y su cabeza la recargo en el hombro de Jeno.
—¿Se siente bien? —preguntó cuándo escuchó los ligeros ronroneos de parte del castaño y siguió acariciando suavemente el vientre de Renjun. Últimamente Jeno se estaba enamorando del vientre del castaño y eso que no ha crecido mucho.
—Tus caricias me están dando sueño—murmuró cansado.
—Duerme entonces—comentó Jeno.
—No mejor cuéntame algo—respondió volteándose a verlo.
—¿Qué quieres saber?
—¿Antes de esto habías querido tener hijos? —preguntó un poco dudoso no queriendo incomodar a Jeno.
—Sí, pero no pensé que tan pronto—respondió siguiendo con las caricias—, pero ahora ya quiero tenerlo entre mis brazos
Renjun sonrió ante la respuesta y se pegó lo más posible a Jeno. Al pelinegro no le molestó en lo absoluto.
—¿No tienes miedo? Digo vamos a ser padres primerizos—habló Renjun.
—Un poco. No tengas miedo porque me vas a tener a mí y a tu familia. Claro, también contarás con la mía— aclaró con una sonrisa.
Renjun recordó la conversación que tuvieron en la universidad acerca de porque lo molestaba y el pelinegro había respondido que tenía sus razones, quería saber cuáles eran sus razones.
—¿Cuáles eran tus razones para molestarme? —preguntó mirándolo a los ojos. El pelinegro no comprendió la pregunta cuando salió de los labios del menor, pero luego de segundos relajó su rostro.
—Quería llamar tú atención.
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Una Llegada Inesperada | ♡ NoRen ♡
FanficRenjun y Jeno son enemigos, pero en una noche de borrachera ambos tienen sexo Renjun queda embarazado y ahora tendrán que lidiar con eso y con su odio. Adaptación autorizada Todos los derechos reservados a @Naomi5011.