Una Llegada Inesperada | ♡ NoRen ♡

Capítulo 17

Cuando escuchó esas simples palabras salir de los labios carnosos del pelinegro sintió una presión en su pecho y un cosquilleo en el estómago. No sabía que decirle y es que aún no asimilaba que Jeno se sintiera atraído por él, porque antes de todo lo que pasó, Jeno era la persona quien lo molestaba, era la persona con la que a veces se agarraba a golpes y ahora simplemente él suelta que se había sentido atraído por él.

No pudo responderle algo, porqué el sonido de su teléfono con una llamada entrante de Chenle no lo dejó. Sintió alivio porque no sabría que responderle en ese instante.

Se encontraba en la cama con el control remoto en su mano izquierda cambiando de canales sin intención de mirar algo. Quería preguntarle a Jeno si todavía se sentía atraído por él o sólo fue en esos meses.

Su teléfono vibró en la cama. Lo tomó encontrándose con un mensaje de Jeno.

Jen: Voy a pasar por ti en unos minutos para ir con los chicos a una cafetería para despedirnos de Mark cómo debe.

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—Pensé que no vendrías—dijo Chenle acercándose a Renjun—, ya sabes, pensé que te encontrabas cansado.

—No lo estaba—habló mirando por todo el local encontrándose a Donghyuck y Mark—. Quería despedirme de Mark.

Miró a los dos chicos, quienes se encontraban abrazados. Mark lo abrazaba tan fuerte como si no quisiera soltarlo nunca.

—Están tristes—comentó Jeno cuando estuvo a un lado del castaño. No sabía si él pelinegro se encontraba triste, ya que Mark y Jeno han sido mejores amigos, desde que él sabe, desde la secundaria.

—Se nota—dijo el castaño con un puchero.

—No vayas a llorar—exigió Jeno. No soportaba ver a Renjun llorar.

—¡Pero quiero! —dijo con la voz rota mirando a Jeno. Este rodó los ojos abriendo sus brazos para que Renjun lo abrazara.

—Esto es raro—dijo Chenle mirando cómo se abrazaban. El castaño estaba de puntitas con sus brazos envueltos en el cuello de Jeno.

—¿Estas mejor? —preguntó luego de unos minutos, alejándose un poco para poder mirar a Renjun. Pasó su mano por las mejillas del castaño ocasionando que adquirieron color a los pocos segundos.

—Sí. —Asintió alejándose del pelinegro, luego miró a Chenle quien movía sus cejas. Bajo la mirada sonrojado—. Creo que hay que ir con los chicos.

Se acercaron a la pareja quienes seguían abrazados, Renjun hizo un gran esfuerzo para no ir y unirse al momento íntimo de ambos chicos. No tuvo que hacerlo, porque luego de segundos se alejaron.

Jeno hizo que Renjun tomara asiento, para luego sentarse a lado de él. Chenle se sentó enfrente de ellos apoyando sus codos en la mesa recorriendo la mirada por todo el menú.

—Vamos a ordenar—comentó Mark tomando su cartera de la mesa—. ¿Qué van a ordenar ustedes?

—Yo quiero una hamburguesa y una soda—respondió Chenle dejando el menú en el mismo lugar donde lo encontró.

—Renjun y yo queremos la ensalada con jugo de naranja natural—se limitó a decir. El castaño abrió la boca ofendido.

—¡Pero yo quería una rebanada de pizza! —dijo molestó Renjun—. No puedes decidir por mí.

Mark y Donghyuck se dieron una mirada para luego caminar para ir a ordenar. Chenle miró de reojo a Renjun y siguió mirando su teléfono.

—Claro que puedo—habló—. Renjun, estamos esperando un bebé tienes que cuidarte.

—Bien—aceptó cruzándose de brazos. Es que no podía dejar de comer cosas con grasa de un día para otro.

—Renjun no te molestes—tomó la mano del castaño. Renjun miró sus manos que estaban entrelazadas.

—Tienes razón.

—¿Renjun? —El castaño alzó la vista encontrándose con una vieja amiga. Era su mejor amiga de la secundaria.

—¿Yuqi? ¡Yuqi! —Se levantó acercándose para poder abrazarla—. ¿Cómo has estado?

—Demasiado bien. —Lo abrazó de vuelta por unos minutos y luego se alejó.

—Pero mírate estas hermosa. —La tomó de la mano e hizo que diera una vuelta.

—Mírate tú—Bajó su mirada encontrándose con el vientre abultado del castaño—, pero estas embarazado.

—¡Lo estoy! —dijo orgulloso. Jeno sonrió enternecido.

—Ven quiero presentarte a mis amigos. —Hizo que la castaña se acercará. Miró a Jeno—. Yuqi te presentó a Jeno, Jeno te presento a Yuqi.

—Mucho gusto—habló amablemente.

—Y este de aquí—Apuntó a Chenle, este sólo rodó los ojos—, es mi mejor amigo Chenle.

El rubio solo alzó su cabeza en señal de saludo para volver su vista a su teléfono. Yuqi apoyó la palma de su mano en el vientre del castaño mirándolo con cariño.

—¿Quién fue el hijo de puta qué te embarazo? —preguntó ella. Renjun aguantó una carcajada, pero no pudo aguantarlo y se echó a reír.

—Este chico de aquí. —Apoyó su mano en el hombro de Jeno. Renjun se sonrojo sintiendo la mano del pelinegro deslizarse por su cintura y encontrar su lugar ahí.