Caí En Tus Alas

Molinos

-Ay... Que guapa luce usted señorita Tamara- dice mi madre con un tono formal pero amigable

-Gracias señora, usted luce muy guapa también-

Tam voltea a verme...

-Tu también luces maravillosa Sara- sonrie y me guiña el ojo

Papá llegó junto con Rogelio para llevarnos a la gran cena que nos esperaba. Llegamos y había personas de mucho poder económico, mujeres usando joyas increiblemente caras, hombres portando trajes de mas valor de lo que una persona promedio gana al mes.

-Creo que entramos a un mundo en el que importa mas una joya, que una vida- susurró Tam a mi oído

-¡Claire!¡Francis! Un gusto volver a verlos- Oliver, un compañero de papá de alto nivel se acercó a mis padres con gran gusto y elegancia.
- Por favor pasen y sientense con nosotros-

Caminamos por todo lo que parecía un palacio hasta llegar a nuestra mesa donde había, embajadores y otras personas con alto nivel. Nos sentamos.

-¿Qué piensan sobre el comercio entre Estados Unidos y México?-  menciona una de las mujeres sentadas en la mesa llamada Britgget

Ya van a empezar con sus pláticas de horas. Esa conversación duró al menos 1 hora. Después comenzó la intervención...

-¿Sabían que ya aprobaron el matrimonio entre homosexuales?- comenta Marcus mientras tomaba una copa de vino

-¿Qué? Dios Santísimo ¿Porqué aprobaron eso?- pregunta Samara

-Ya es suficiente con tener que verlos en las calles como pareja, como para tener que verlos en un matrimonio- se ríe Riuka

-Pues es asqueroso, la verdad una ley que les permita casarse ya es demasiado- señala Christopher

Tocaron un tema difícil, no solo por mi... Tam... Tocaron su nervio sensible

-Perdónenme, pero son injustos sus argumentos- replica Tamara. - ¿Se imaginan que viviéramos en un mundo donde haya puros homosexuales? ¿Y que los que sean discriminados sean los heterosexuales? Bueno, imagínenselo por un momento, sus vidas son difíciles, pocas personas los aceptan como son... Y son como ustedes, con prejuicios, con sueños, con ilusiones, con tristezas, con esperanzas, con sentimientos, con fé, con creencias, con amor...

-Tam, siéntate- dije en voz baja

-Eso es una tontería, digo, son humanos y todo, pero son como inecesarios... - replicó Cerinne

-Es cierto no es como que sean relevantes- levanta la voz mi madre

Ay mamá...

-¿Saben que son todos?  Unos malditos bufones ignorantes que solo se cierran y no se atreven a conocer mas- Tam se enfurece

-Francis ¿Quién es esta chica?- le susurra Tyler a mi padre

-Por favor detén esto- Scott agita el hombro de mi padre

-Tamara por favor- mi padre se levanta de la mesa y le grita mientras ella seguía con su discurso, cuandoi padre le grita, ella se calla de zopetón

-Perdonen- Tamara se levanta y se sale enojada del lugar

Hubo un gran silencio en la mesa...

-¿Qué fué todo eso?- dice Britgget

-Disculpen fué un error que no se volverá a cometer- dice mi padre muy arrepentido

Ay Dios... Pobre Tamara.

- Sara ¿Podemos hablar un minuto?- Pidió mi padre con cierto enfado

-Claro- afirmé y salimos

-¡Dile a tu amiga que se calme por favor!- gritó muy enojado

-Pero papá, solo defendía su punto de vista... - quise hablandar la situación

-Me hiso quedar como un imbécil ¿Sabes cuánto me puede perjudicar su conducta socialmente? ¿Lo que pensarán también de ti?- me reclama

-No sabía que esto hiba a pasar- reclamé

-Más te vale que hables con ella y le digas que pida una disculpa por insultar a las personas sentadas en la mesa- regañó mi padre

-Se lo diré, pero tu... ¿Les pedirás a ellos que se disculpen por ser groseros e insultar una forma de pensar?  Si les pides eso, yo le pediré lo otro a Tamara- Exijo

-No haré eso, me hará quedar peor- mi padre mantuvo su postura

-Entonces yo no iré a pedirle a Tam que se disculpe con ellos- me enojé

-Antes no eras asi ¿Es causa de tu nueva amiga?- me reclama

-En parte si, me hiso mejor, me abrió la mente, ya no quiero estar por debajo de las personas dejando que me pisotén, pero tampoco quiero estar arriba de los demás creyendome mejor como lo eres tu, mamá y todos los demás- enserio estoy furiosa

-En este momento le vas a pedir a tu amiga que se largue de aqui y que jamás te vuelva a hablar y te quiero ver hacerlo o sino simplemente te vas de mi casa y yo no te voy a ayudar en nada y a ver como le haces- advirtió

-Prefiero dejar de vivir en tu casa a seguir conviviendo con gente superficial- dije con mi postura recta y en ese momento mi padre me da una cachetada de los 1000 demonios.

Me golpeó...

-Si tu no la hecharás, lo haré yo- mi padre se fué con pasos firmes del otro lado del jardín que se encontraba afuera del lugar donde era la cena. Traté de seguirlo pero entre tanta gente no lo pude localizar y lo fuí a buscar por todos lados.

Tamara estaba sentada en una banca de piedra mirando a la fuente.

-¡Tamara!-  Gritó mi padre

Tamara volteó hacia atrás.

-Tienes prohibido volver a ver a Sara, tienes prohibido volver a acercarte a nuestra casa... Lárgate de aqui- impuso mi padre

Cuando al fin encontré a mi padre, Tamara se había hido ya, se fué muy rápido.

-Listo- dijo mi padre muy alegre

-Voy con ella- dije tratando de avanzar pero el me detuvo

-Tu te quedas aqui- rugió mi padre

Me empujó hasta nuestra mesa todo el camino, me senté y todos los compañeros y amigos de papá siguieron su plática sobre economía, guerras y "cultura".

No resistí más de media hora escuchándolos hablar, hablar, hablar y hablar. Me levanté de mi mesa y salí corriendo de ahí. Como Rogelio vendría por nosotros más tarde, el no estaba en el estacionamiento. Busqué un carro que me llevara a la casa de Tam. Por suerte encontré uno disponible y con gente muy amable.

Cuando llegué a la casa de Tam, había patrullas y una ambulancia, también Sof y otra chica con los ojos llorosos.

¿Tam? ¡Tam!