Re:Zero oboreru fanfic "Re:Ahogándose en la ira desde cero"

dios Oni

Narra Vega:

Me encontraba recostado en esta cama en la noche mientras tenía la cabeza reposando en la almohada.

El día de hoy no estuvo tan mal. Por un momento creí que iba a ser reprendido por mamá.

Ahora que lo pienso... esa biblioteca me gusto, aunque había mucha gente, en su mayoría semi-humanos.

Vega: ahora que recuerdo... Kararagi es un país cuya probación es principalmente de demi y semi-humanos...

Tal vez vuelva en la mañana para saber si hay un libro de la raza del tío Halibel.

Hace tiempo escuche que su raza estaba en peligro de extinción.

...

Me da curiosidad saber sobre las demás razas... por lo que sé la raza dominante en el mundo es la humana, la cual mamá me dijo que era considerada la más débil, pero que debes en cuando nace un individuo con gran poder como Cecilus o el santo de la espada.

Vega: hmm...

Humanos...

Moví mi mano izquierda frente a mis ojos y recordé que papá era un humano al igual que Cecilus.

Vega: ¿Qué raza era mamá?

Busqué en mi memoria y lo recordé segundos después.

Vega: a cierto. Un oni...

Hice un sonido pensativo mientras me preguntaba que si como este es un país de demi-humanos entonces posiblemente se encuentre información de Onis aquí.

Vega: cierto... hay muchas cosas de demi-humanos en esta ciudad... y mamá es una demi-humana.

Ahora que recuerdo cada vez que quiero preguntarle a mamá sobre los suyos solo me dice que eran de las razas más poderosas. Que solían vivir en aldea separadas de los demás al no querer adaptarse a los nuevos tiempos, pero nada más que eso.

No sé porque mamá se fue de su aldea, de hecho, no sé nada del pasado de mis padres.

No sé cómo se conocieron o de donde provienen.

Cada vez que preguntaba sobre si tenía otros familiares preferían evitar el tema. ¿Por qué será...? ¿acaso algo les paso?

¿será que ella al conocer a papá decidió huir de casa?

Vega: no, no... - dijo mientras giraba su cabeza en negación.

No me imagino a mamá haciendo algo así.

Flashback:

Era de noche, me encontraba caminando por el pasillo hacia mi habitación ya que había salido para comer la mayonesa del escondite secreto de papá.

Es más, de paso aproveche en preparar un sándwich.

En eso escuche un ruido detrás de la puerta donde estaba la oficina de papá, la cual parecía ser la voz de mamá.

Ram: más rápido Barusu, ¿o acaso quieres que yo sea la que se mueva?

Subaru: ahora es mi turno, además, mis caderas no lo aguantarían.

Ram: Barusu, tú hablas como un hombre de mediana edad ¡para de ser tan engreído!

Subaru: no lo digas tan fuerte, nos pueden oír.

Ram: Barusu, eres tonto como una piedra y feo como una blasfemia, pero para lo único que me sirves es para esto, así que cumple con tu deber.

...

Mi oreja izquierda estaba a solo milímetros de la puerta, pero aun así no logre escucharlos del todo bien debido a que la madera que se usó para hacer esta puerta era una muy resistente.