❝ odd ᥱყᥱ ❞

十九

Un suspiro escapó los labios de Kunhang una vez apagó su alarma, sentándose en la cama para restregar sus ojos con cansacio, aunque tratando de despabilarse.

El día había llegado, debía volver a la universidad.

Lentamente se sentó y removió las mantas, volteando para apoyar los pies en el suelo, el cual ya no se sentía frío.
Tomando impulso se levantó de la cama, yendo directamente hacia el baño parándose frente al lavabo para cepillarse los dientes.

Mientras hacia eso peinó su cabello, tratando de acomodar los largos mechones negros, para luego inclinárse para enguajar su boca y lavar su rostro.

Una vez listo secó su piel con una toalla, volviendo hacia el cuarto para sacar ropa del armario, como hacía algo de calor opto por un par de jeans y una camiseta blanca de mangas cortas.

Pero se puso un par de mangas negras cubriendo sus antebrazos y las cicatrices en ellos. Aún no estaba preparado para mostrar sus brazos, pero esperaba poder hacerlo algún día.

Volvió al baño y al observar su reflejo no pudo evitar sonreír un poco. Se veía bien, aunque algo le faltaba; por eso corrió de vuelta al cuarto y fue directo a su escritorio, abriendo el primer cajón y sacándo de allí una cajita blanca y de ella el collar que Yuqi le había regalado por su cumpleaños y un par de aretes que hacía mucho tiempo que no usaba.

Volvió al baño, se puso el collar y los aretes y sonrió ampliamente al verse tan arreglado. Hacía mucho que no se esmeraba tanto en su apariencia y había olvidado lo que era sentírse bonito.

Sin duda alguna se sentía lindo, puede que hasta algo atractívo.

Mordió su labio inferior con emoción y luego de rociar algo de colonia sobre la piel de su cuello salió corriendo en dirección a la cocina para prepararse el desayuno. Lo mismo de siempre, una taza grande de café con un poco de leche, tres tostadas con queso y jalea de frambuesa y una banana.

Preparó todo en unos minutos y luego se sentó a comer disfrutando del silencio de la casa por la mañana.

La tranquilidad que sentía era reconfortante y a pesar de que estaba preocupado por lo que podría pasar, la ansiedad no se sintió tanto como lo hubiera hecho en otro momento.

Terminó la banana y dejó todo en su lugar, lavando la taza y descartando la cascara de la fruta en el cesto de las verduras y frutas. Que estaba en la casa debído a que Lucas decía que debían separar la basura para poder ayudar al medioambiente.

Una risilla escapó de sus labios al pensar en eso.

Secó sus manos con una toalla de papel y volvió a su cuarto para tomar su mochila y guardar los libros que necesitaría, volviendo unos minutos después a la sala con su teléfono en mano y la cabeza gacha.

ㅡ¿Ya te vás?

Hendery levantó la vista, encontrándose con Sicheng vestido de traje, listo para írse al edificio de la empresa en la que trabajaba como recepcionista.

ㅡBuen día...ㅡ murmuró, preguntándose si Sicheng se había levantado antes o después que él. Asintiendo lentamente. ㅡSi, gē...

Sicheng asintió lentamente, bajando la cabeza mientras simulaba acomodar las mangas de su saco, acción que no le pasó desapercibida al menor.

Hendery es muy callado pero también observador y no le era difícil sabér cuando alguien se sentía mal o ansioso en este caso, así que suspiró y avanzó hasta quedar frente a Dong. ㅡGē.

Sicheng levantó la cabeza, sorprendido al ver que Kunhang estaba mirándole a los ojos sin temblar y sin correr la mirada.

ㅡ¿Estás preocupado?ㅡ dijo Wong.
ㅡ¿Tú también crées que no estaré bien?