La vida perfecta de Frank (Frerard)

Capítulo 14: Te quiero a ti

Habrá pasado al menos una semana desde que le rompí el corazón a Jamia, desde que arruiné su día soñado y desde que mi vida perfecta comenzó a desmoronarse. Mis padres están bastante molestos conmigo y con justa razón. Si bien logré convencer a Mikey de que no dejara el trabajo por esto, sigue sin dirigirme la palabra, ni siquiera ha vuelto al departamento por la mayoría de sus cosas ni las de Gerard, que siguen ahí, y siento tanta nostalgia. No he querido ir a buscarlo, no lo he considerado prudente con mi ruptura con Jamia tan cercana, pero en serio necesito verlo. He mantenido contacto con Ray, quien me contó que Gerard se mostró bastante sorprendido cuando le dijo que yo no me había casado, sin embargo no hizo más comentarios.

Hoy iré a buscarlo, a él y a Mikey, necesito arreglar las cosas con ambos, por lo que le he pedido a Ray que me ayude organizando una cena en su casa.

¿Me veré ridículo llegando con un ramo de rosas rojas para un chico? No lo sé ni me importa, sólo quiero que Gerard me disculpe por mis estupideces y me acepte de nuevo en su vida.

Me sudan las manos al estar frente a la casa de Ray. Toco y mi amigo afro me recibe con una sonrisa en los labios. Cuando ingreso encuentro ahí a los hermanos Way, sentados en la mesa, ambos me miran sorprendidos de que esté ahí.

- ¿Qué hace Frank aquí? - Cuestiona Mikey

- Mikey, yo sólo necesito hablar contigo... y con Gerard – Me mira algo molesto, sin embargo acepta escucharme, por lo que nos dirigimos Ray y yo a la mesa – Mikey, eres mi mejor amigo y... yo sé que actué mal, que debí contarte lo que pasaba y más al estar tu hermano en medio, pero por favor discúlpame. Quiero que tú y Gee regresen a la casa, no intentaré nada, lo prometo - Mikey parece pensar en mis palabras y comienza a hablar.

- Frank, es que todo esto ha sido tan... raro. Acepto tus disculpas y tal vez exageré un poco, pero es que entiende, es mi hermano... sólo espero que no lo lastimes

- No lo haré – Menciono tendiéndole mi mano, Mikey la toma, me da un fuerte apretón y me dedica una tenue sonrisa – En serio te extrañé, amigo – Le digo, y es que aunque amo a su hermano, no puedo negar que en estos días que han sido tan difíciles, me ha hecho tanta falta mi mejor amigo.

Dirijo ahora mi mirada a Gerard, quien la esquiva para no verme a los ojos, pero quiero arreglar las cosas con él, quiero que me deje ser parte de su vida.

- ¿Crees que pueda hablar contigo Gee... a solas? - Le digo y voltea a verme, luego mira a su hermano y posteriormente a Ray

- Gee, si quieres hablar con él, hazlo – Le dice Mikey, por lo que se pone de pie para dirigirse a la sala, a donde lo sigo. Se sienta en el sillón y yo me coloco frente a él. Le doy el ramo de rosas

- Son para ti Gee – Él las toma, no dice nada y simplemente se queda ahí, mirándolas

- Gee, sé que debí hacer las cosas diferentes, pero es que todo pasó tan rápido, llegaste a mi vida y lo cambiaste todo. No creí enamorarme como lo estoy de ti... yo... sólo quiero que me perdones, que me dejes estar de nuevo en tu vida. Regresa a la casa por favor, te prometo que no intentaré nada, todo será como tú digas, pero por favor, déjame tenerte cerca – Le digo mientras que él me mira con sus ojos verdes, no dice nada y su silencio me carcome - ¿Qué dices Gee? - Insisto

- Está bien Frank, regresaremos... eres el mejor amigo de Mikey... yo no debí dejar que se alejara de ti... por mi culpa

- Gee, qué dices, tú no hiciste nada, soy yo el imbécil, el que hizo mal las cosas, pero te prometo que ahora será diferente y volveré a ganarme la confianza de Mikey... y espero ganarme tu corazón.

Gerard no dice nada más y vuelve a centrar sus ojos en el ramo de rosas, pero con eso me basta, con que me permita acercarme de nuevo. Sé que no será sencillo, pero nada que vale la pena lo es. Esperaré el tiempo que sea necesario, porque mi chico de los ojos verdes lo vale, él lo vale todo.