(PARTE 2)
Sentado en esta silla, teniendo a mi lado a mi gemela y frente a nosotros a mis dos amigos, no puedo creerme que este día haya llegado tan pronto y lo esté celebrando después de todo lo que ha pasado.
Dos años son tantos meses como sucesos que quedan en mi memoria con cada minuto que pasa que muchas noches no puedo dormir hasta bien entrada la madrugada, siendo bastante agotador cuando eso sucede más por como lo notan mis compañeros de la universidad o del trabajo en cuanto me ven.
— Kihyun —miro a Min —estás en tu mundo en lugar de prestar atención a este delicioso pastel de cumpleaños que te he preparado. Tu hermana lo aprecia más que tu y eso me duele, eres mi amigo.
— Perdoname Minhyuk.. solo estoy un poco cansado eso es todo —me disculpo mirando las velas —sabéis que no tenia ganas de celebrar mi cumpleaños pero lo haré porque has puesto todos tus esfuerzos, los dos lo habéis hecho por Kiori y por mi.
— Hemos cogido un avión para estar hoy aquí con vosotros —asiento consciente de ello —pedir un deseo y soplar esas velas para que podamos endulzarnos un poco más en el día de hoy.
Siendo verdad que Minhyuk y Jooheon se han encargado de preparar dos pasteles de cumpleaños para mi gemela y para mi me limito a observar la mía, mirándola tan atento como centro mi atención en las velas que forman un número dos y un número uno, cerrando en el mismo momento que junto mis manos para así pedir mi deseo en mi cumpleaños numero veintiuno.
Manteniendo mis parpados unidos, mis dedos entrelazados, frunzo mis labios lo suficiente como para apagar las velas que ahora que he abierto mis ojos veo como unicamente liberan ese negrizo humo que queda eclipsado por los paquetes envueltos que tanto en dirección a las manos de Kiori van dirigidos, así como también a las mías sorprendiéndome por contar cuatro y no tres como debería ser a pesar de la ausencia de Jeonghan.
— ¿De quien es el cuarto regalo si sois tres? —los dejo a un lado —espero que no sea de quien me estoy suponiendo porque vosotros sabéis cual es y vuestro deber es quitarlo de en medio.
— Han pasado más de dos años —niego —Kihyun se que le has olvidado y que Hyunwoo se pasó bastante diciéndote esas cosas pero ha tenido la decencia de enviarte un regalo de cumpleaños tanto este año como los dos anteriores. Al menos abre este ya que los otros dos los devolviste.
— Uno se lo tiró a la cabeza —miro a mi hermana gemela —no me mires así. Se lo tiraste a la cabeza a las tres de la madrugada porque te envió un regalo de cumpleaños a tus diecinueve oficiales.
Mirando a mi hermana desviando mi atención a mis dos amigos intento no pensar en ello aunque sea difícil dado que es una verdad demasiado cierta que hace dos años exactamente le arrojé ese regalo de cumpleaños a Hyunwoo a la cabeza tan solo por habérmelo enviado después de cuanto me dijo y ocurrió tras sincerarme con él con respecto a mi verdadero yo.
Sentándome bien en esta silla que estoy ocupando desde hace ya demasiado tiempo, veo a mi hermana y a los chicos disfrutar de un pedazo de pastel que colocan en cada plato que previamente hemos sacado, siendo que las velas están a un lado ya sin molestar para poder comer los dulces tranquilamente. En mi plato al igual que en los demás hay dos pedazos de pastel, cada uno de un color y sabor escogidos a medida de mi hermana y de mi mismo, siendo así la elección de las dos personas que frente a mi hablan y ríen como si no ocurriese nada, como si no hubiese un tormento en mi cabeza ahora mismo cargado de ideas y recuerdos de lo que sucedió en aquel entonces.
Vivir en esta casa supone para sentir una calma que no sabría ni de su existencia si hubiese decidido continuar en ese lugar donde crecí y viví con un hombre al que debería considerar un padre porque biológicamente lo es, siendo imposible tal cosa al no verle casi nunca por la razón que le llevaba a marcharse durante largos meses hasta que decidiese volver.
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The first time I saw you / Showki /
FanfictionNinguna apariencia mostrará siempre la realidad que el ojo quiere ver, que el corazón puede aceptar. Kihyun se verá obligado a vivir una vida que aunque tenga mucho que ver consigo mismo, no será voluntaria la decisión de ocupar el lugar de su herma...