Capítulo veinticinco (II)

34 4 1
                                    

Rodeado de la suave brisa que acaricia mi cuerpo, que roza intencionadamente cada parte de mi anatomía enfriando hasta cierto punto mi piel siendo una brisa nocturna ciertamente fría, no puedo calmar mi cabeza con todos esos pensamientos con respecto a lo que horas atrás ha pasado, con los señores Son de testigos en todo momento.

Desde que nos acercamos a esta enorme mansión que a mis espaldas se encuentra, entrando en la misma y siendo el encuentro con los padres de Hyunwoo real, no he podido sentirme tranquilo, siendo incapaz por completo de ello incluso en este momento en el que me encuentro a solas en plena noche en la que las estrellas aún no han hecho su aparición, siendo unicamente testigos de mi presencia los coches de esta familia a la que no tengo intención de pertenecer pero soy consciente de que debe ser así por mi relación con Hyunwoo y por el bebe que en unos meses nos saludará en su nacimiento.

Moviendo mis brazos, acercando mis manos hasta la parte de mis hombros en la que afianzo la tela de esta chaqueta a mis dedos, tiro de ella cubriéndome mejor con la prenda con la que me resguardo de mejor forma de la ligera y fría brisa que cada vez se va volviendo más intensa, siendo seguro que pronto me obligará a entrar en esta mansión en la cual no quería ni quiero pasar aunque sea una noche.

— Kihyun, deberías entrar.

Apartando mi atención de la nada donde la tenia fija, mirando a Hyunwoo en este momento en el que se limita simplemente a detenerse a mi lado viéndose una vez más la diferencia entre su altura y la mía, la forma de su cuerpo y del mio propio, se que tiene razón, que debería entrar ya y no dejar que el frio siga adueñándose de mi pudiendo ser un riesgo si enfermo para el bebe, teniendo al mismo tiempo ganas de quedarme un rato más antes de cruzar esa puerta.

— No tenia el pensamiento con respecto a pasar la noche en la mansión de tus padres —no aparto mi mirada de Hyunwoo —más que nada porque mi idea era venir, hablar con ellos y aunque tu quisieras quedarte yo me estaría quedando en casa de los chicos o tal vez en la de mi padre a sabiendas de que no estará allí.

— Es solo una noche —asiento, consciente de ello —pero si estás incomodo puedo ir ahora mismo a arreglar la casa en la que viviremos tu y yo y nos quedamos allí.

— Son casi las once de la noche, no vas a ponerte ha arreglar nada a estas horas —acaricio mi vientre ligeramente abultado —supongo que podré soportar una noche en la casa de tus padres. No creo que en mitad de la noche se metan en la habitación donde voy a dormir para torturarme o algo así. Cerraré con seguro.

— ¿No tendrás pensado dormir donde dormías cuando trabajabas aquí? —asiento —ese cuarto es muy pequeño al igual que la cama, estarás incomodo Kihyun.

— ¿Podía dormir ahí cuando era Kiori pero no ahora? —nuestras miradas se encuentran —dormiré en el carísimo sofá entonces si lo prefieres.

— Vas a dormir en mi cama, es más grande y más cómoda además de adecuada para ti y el bebe —sostiene mi mano entre las suyas —y no vas a discutir conmigo al respecto porque no cederé.

— ¿Si yo duermo ahí, tu donde dormirás?

Mirándole fijamente, siendo que mi mano aún está retenida entre las suyas y mi pregunta en el aire y habiendo sido escuchada por Hyunwoo, mis pies se mueven casi al mismo ritmo que los suyos cuando nos hace caminar tan solo un mínimo de tiempo después, cruzando en estos momentos la puerta de entrada de la mansión, también la distancia hasta las inmensas escaleras que unas pocas veces subí cuando trabajé aquí siendo mi hermana y no yo mismo, encontrándome cuando me quiero dar cuenta regresando a la realidad en su dormitorio, frente a su cama y sin las manos de Hyunwoo sosteniéndome ni su cercanía frente a mi.

The first time I saw you  / Showki /Donde viven las historias. Descúbrelo ahora