𓏲 🍁﹕𝐅𝐢𝐧𝐚𝐥 ˒˒

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Bien, antes de leer, necesitan tener la explicación y es que... Sí, me salté un capítulo, perdón por arruinar su lectura, y también confundirlxs. Ahora sí, disfrútenlo.

Ahora estaba viajando entre las nubes

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Ahora estaba viajando entre las nubes. Su pequeñita bebé descansaba en su regazo, cubierta por una cobija marrón casi café como los bonitos ojos de su alfa.

Varias personas le habían expresado su confusión con respecto al color de aquella manta que JeongHan había escogido, pues decían que el marrón era para los cachorros varones y que el rosa habría sido mejor elección dado el género de Alaska. JeongHan sólo respondía de la forma más educada posible que él no seguía jodidos estereotipos y que si quería una puta manta marrón para su hija la tendría.

Porque él el marrón era mucho más significativo, porque el marrón despertaba en él sensaciones de calma, de alivio, de esperanza, porque el marrón lo llevaban los ojos del alfa que tanto amaba. Porque Joshua era el marrón, y ahora lo sabía, el marrón jamás lo traicionaría.

Y es que, además, Joshua siempre había sido su manta, su cobija, su refugio, porque envuelto entre sus brazos el frío se alejaba, la calma lo inundaba y él se acurrucaba entre la suavidad de su tacto.

Joshua era la perfecta manta marrón, aquella que JeongHan no supo apreciar desde el principio, aquella que el omega maltrató creyendo que no era merecedor de su acogedor calor, prefiriendo quedarse con el frío al que ya se había acostumbrado. Y aún así, maltratada y adolorida, su manta marrón volvía a él para abrazarlo una vez más, para calmarlo de todo dolor, para abrigarlo y darle la sensación de que regresaba a casa.

Y JeongHan quería que su bebé también tuviera su propia manta marrón, aquella que la hiciese sentir a gusto con la suavidad de su roce como si estuviese en una tarde tranquila en casa y no en su primer vuelo de avión. Aunque en aquel caso era literal, y no metafórico como lo era con Joshua.

En fin, le gustaba el marrón.

Y allí estaba, atravesando aires europeos, arribando hacia Italia solo para ver al jodidamente hermoso amor de su vida.

Los planes habían sido cambiados. Se suponía que a Joshua lo trasladarían a Seúl en cuanto fuese posible y allí sería su reencuentro con todos, pero, debido a las ansias de JeongHan, decidieron trasladarse ellos a Italia para acompañarlo en su recuperación.

Y JeongHan estaba emocionado, aunque temeroso. No sabía en que condiciones se encontraba Joshua ahora mismo, no sabía que tan lastimado estaba externamente. Solo sabía que apenas lo vería se echaría a llorar.

Tras aterrizar en Roma, JeongHan y su bebé, junto a WonWoo y una pequeña porción de la familia de Joshua, se dirigieron en autos escoltados por guardaespaldas hacia el hotel en el que se hospedarían durante su estadía allí.

JeongHan ni siquiera sintió ganas de curiosear su cuarto de hotel, ni de detenerse a contemplar los increíbles lujos de éste, ni la maravillosa vista. Sólo tenía mente para Joshua. Por lo que, apenas cambió el pañal de su pequeña y la alimentó, la dejó al cuidado de WonWoo, listo para partir hacia el hospital, el cual, al parecer, no quedaba muy lejos de allí.

ᨳㅤֶ֢ ㅤ۫  𝐒𝐮𝐛𝐥𝐢𝐦𝐞 𝐝𝐨𝐦𝐢𝐧𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧 ᵎDonde viven las historias. Descúbrelo ahora