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"¡Vamos Dixon suéltalo!"
Hizo una mueca de dolor cuando uno de los golpes fue dirigido a Rick.
"¡Detente! ¡Dixon!"
"¡Déjalo!"
"Dixon, lo lastimarás."
Oh, cuánto hubiera preferido quedarse en la planta baja.
"¡Merle! Déjalo ya."
Brincó los tubos, acercándose a la pelea que se había formado, con una patada en el rostro separó al hombre Dixon, antes de que se levantara volvió a patearlo, esta vez en las costillas.
"Carajo, pero si esta es la versión mala del chino de Glenn." Merle sonrió, mirando al contrario
Soltó una risa por lo mencionado, volviendo a patear su rostro.
Dixon sacó una pistola, apuntándole.
"No, no." Glenn trató de acercarse, encontrar y perder a su hermano el mismo día solo podía ser una broma de mal gusto.
Yeong ni se inmutó a ser apuntado, no era la primera vez ni tampoco la última.
Grimes llegó por detrás del hombre, dándole un golpe en la cabeza, ocasionando que soltara el arma, esposando una de sus manos contra un tubo cercano.
"¿Quién eres amigo?" Se quejó Dixon.
"El oficial amigable." Respondió Rick.
Y si, Yeong quiso reírse por aquello, acercándose también. "Escucha Merle, las cosas ahora son diferentes, ya no hay más negros entre nosotros, tampoco hay más estúpida basura blanca, solo somos nosotros y los muertos." Miró a Rick, sonriendo. "¿No crees que somos una gran pareja?"
"Vamos a sobrevivir juntos, no separados." Grimes ignoró las últimas palabras.
"Váyanse al demonio."
"Veo que sueles no comprender Merle."
"¿Sí? Bueno, vete al demonio otra vez."
Rhee se cubrió la boca para evitar que se viera y escuchara su risa ante las reacciones de su compañero.
"Más respeto al hombre armado." Rick apoyó el cañón del arma en el cráneo.
"Es sentido común." Susurró Yeong en el oído del esposado, la situación le divertía.
"No lo harías, eres policía."
"Ahora lo único que soy es un hombre, buscando a su esposa y a su hijo."
La sonrisa del rubio pasó a ser una mueca, el cambio solo fue visible para su hermano, que desde tiempo le observaba.
"El que se meta en mi camino, saldrá perdiendo."
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