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Los gritos de una mujer resonaron por el bosque.
Apretó la cuerda en sus manos, cabalgando en busca del origen de tan escandalosa escena.
En verdad, ¿Quién carajos gritaba de aquella manera?
Bueno... Su pregunta fue respondida en el instante en qué vio a Andrea en el suelo, pataleando inútilmente hacia un caminante.
Maggie se le adelantó, golpeando el cráneo del putrefacto con el bate que traía.
"¿Estás bien?" Preguntó Yeong, extendiendo su brazo hacia Andrea, la fémina asintió, confundida por su aparición con la chica desconocida.
Cuando la rubia estuvo en pie, separó su agarre.
"¿Lori? ¿Lori Grimes?" Preguntó Maggie al grupo que se acercaba.
"Yo soy Lori ..."
"Debes de venir ahora."
"¿Qué?"
Yeong bajó de su caballo, acercándose al grupo. "Hubo un accidente, hirieron a Carl, aún está vivo, pero necesitas venir ahora." La mujer le miró con una expresión de sorpresa, rodó los ojos, tomándole de los hombros. "Él te necesita, ya."
Lori se deshizo de su mochila, y subió al caballo en donde se encontraba Maggie.
"Rick dijo que había otros en la carretera, en el embotellamiento, retrocedan tres kilómetros y encontrarán nuestra granja con un buzón que dice "Greene""
Glenn parecía prestar más atención a la dulce chica que a sus palabras.
Antes de subirse a su caballo correspondiente, el rubio se acercó, dándole un pequeño golpe en la cabeza a su hermano.
No recibió ni la más mínima queja...
Si, lo había perdido.
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Rick abrazaba con fuerza a Lori, para muchos podía ser un encuentro emotivo.
Estaba siendo egoísta, le dolía verlos así, y deseaba con ganas ocupar el lugar de Lori.
Grimes la necesitaba, más ahora que nunca, tenían un hijo, herido.
No se quedaría como idiota viéndolos.
El contacto de una mano sobre su hombro le hizo voltear a ver, Maggie le brindaba una linda sonrisa.
Trató de devolverle el gesto, más no pudo, de sus labios solo apareció una mueca.
"¿Tienes... Algún coche?"
Si podía ayudar a qué Carl sobreviviera, lo haría.
Incluso si eso significaba alcanzar a Shane y Otis en la universidad
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"La presión vuelve a bajar, no podemos esperar mucho más." Hershel anunció.
"Quítame más, la que necesite, luego me iré." Rick extendió su brazo.
"¿Irte a dónde?" Lori, recargada contra la puerta de aquella habitación, miró con preocupación a su esposo.
"Dijeron ocho kilómetros, Yeong fue tras ellos, ya tendrían que haber vuelto, algo salió mal."
"¿Estás loco? No irás tras ellos."
"Rick, escucha a tu esposa."
"Si ellos están en problemas..."
"No estás en condiciones de hacer nada, diste demasiada sangre, apenas y te puedes parar. Ni siquiera llegarías a la puerta."
"Si algo les pasó, yo tengo que ir..."
"No, tienes que quedarte, si Shane dijo que regresará eso hará, en eso es igual a ti." Volvió a hablar Lori, frunciendo el entrecejo.
"No puedo quedarme solamente sentado." Declaró Grimes, sintiendo una gran preocupación en su interior.
Y todo por cierto rubio.
"¡Eso es lo que harás! Si tienes que rezar, llorar o decirle a Dios que es cruel pues hazlo, pero no te vas a ir Rick ¿Qué es lo que te preocupa, Rick? ¿El bienestar de Shane? ¿O ahora todo tu mundo gira alrededor de Yeong?." El silencio de su esposo solo le confirmó lo que tanto miedo le costaba asumir. "Carl te necesita aquí, y yo no puedo hacer esto sola, no esta vez... No puedo." Un miedo recorrió a Lori, acaso ¿Rick se iría de su lado?
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