pintando nuestro Amor © [En Proceso]

capitulo 17

Axel.

Hay personas que dicen que el corazón es el lugar donde se guardan los mejores momentos pero…… hay quienes dicen que también los peores y últimamente me puse a pensar en eso y he llegado la conclusión de que es cierto.

Allí se guarda todo tipo de sentimientos, tanto buenos cómo malos y es algo que no podemos evitar ya que está en nuestra naturaleza.

No soy el chico perfecto que las personas creen, mi vida está llena de errores que yo mismo he causado y que hasta ahora no puedo encontrar la forma de como solucionarlo.

Pero volviendo a la realidad de lo caótica que es mi vida me doy cuenta de que mamá ya está lista y yo sigo aquí frente al espejo tratando de convencer me de si me veo bien cuando en realidad no es así. Decidí usar un jean holgado color crema con una sudadera blanca, unos tenis del mismo color y abrigo color crema que papá me regaló unos días antes de su muerte.

— ¿Necesitas ayuda?.

De inmediato me volteó encontrándome con mamá, ella se ve hermosa, lleva un vestido color negro con unos tacones del mismo color, su cabello está en una coleta alta y su rostro está cubierto por un maquillaje muy simple pero que la hace lucir espectacular.

Ella se acerca a mi y me observa de pies a cabeza.

— Te ves bien cariño.

— No lo creo — respondo volviendo a mirarme en el espejo.

— Confía en tu madre, se lo que te digo a demás…… no es la gran cosa.

— Es una cena con unas personas que nunca en mi vida he visto y quiero estar muy presentable.

— ¿No crees que estás exagerando un poco?.

— No lo hago madre a demás ¿Por qué no me dijiste que era un cena? Pudiste decírmelo anoche ¿No crees?.

Ella se aleja un poco de mí con una sonrisa.

— No es la gran cosa ya lo dije, ahora tenemos que irnos.

Ambos salimos de la casa y subimos al auto, ella es quien conducirá porque dice que yo lo hago muy lento, y la verdad no es así.

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Luego de casi treinta minutos de camino llegamos a un restaurant que está justo en el centro de la ciudad.

Una vez allí ambos bajamos del auto y entramos al lugar, al parecer las personas con las que cenaremos no han llegado aún y ya estoy comenzando a ponerme nervioso.

Luego de diez minutos de espera por fin llegan las personas. Es una pareja y dos jóvenes que por lo que se ve son sus hijos.

Nos levantamos para saludarlos y al momento de saludar a los dos jóvenes me doy cuenta que uno de ellos es nada más y nada menos que el ex de Emma.

Él me observa con una pequeña sonrisa y estura su mano hacia mi.

— Pero mira nada más —  dice mientras su sonrisa crece aún más — el novio de Emma.

Le dedicó una mirada de pocos amigos y estrecho su mano con un poco de molestia.

— Y el imbécil que no para de hablar.

— ¿Cómo está ella por cierto?.

— Muy bien, aunque creo que ese no es tu asunto.

— Te equivocas.

— ¿A si?.

— Si.

Tanto mi madre como sus padres nos observan con un poco de intriga y como mi madre nunca se queda callada ante cualquier situación pregunta de inmediato.