capitulo 5

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Emma

¿Alguna vez has sentido que debes aprovechar cada minuto de tu vida porque no sabes cuándo se acabará?.

Yo soy de esa clase de personas. Me gusta disfrutar todos los momentos hermosos que se me presenten a diario, es como si mi vida solo dependiera de ello y de nada más. Siempre he creído que planear algo para el futuro nunca es bueno ya que no sabemos lo que pueda pasar en ese transcurso de tiempo.

Nunca me a gustado el hecho de que el cualquier momento me pueda morir, se que eso no va a ocurrir, ¿Pero si llegará a pasar? No habría disfrutado mi vida como quiero, por eso siempre vivo al máximo, por eso fue que me arriesgue aquella noche que conocí a Axel en el balcón de la galería. Estaba pasando por un mal momento pero el hecho de que cuando salí el estuviera allí me lleno de satisfacción, de mucha para ser sincera.

Recuerdo que me había llegado un mensaje que me desequilibró por completo, no me espere que él reaccionara de la forma en que lo hizo cuando me vio y se lo agradezco, ya que me hizo sentir mucho mejor cuando me abrazo, el era esa persona que necesite justo en ese momento.
También recuerdo que cuando llegue a casa le conté a Peyton y ella me dijo que lo conocía y me dio su dirección, admito que fue demasiado arriesgado ir a su casa ya que solo habíamos cruzado palabras una sola vez y fue la noche anterior, cuando fui a su casa lo noté un poco molesto al momento de abrir la puerta y me imagino que fue por la chica que había salido de allí justo antes de que yo llegará, me preguntó ¿Qué son? Sin embargo; ese no es mi asunto. a pesar de que me trató un poco mal cuándo le dije que su cerebro estaba mal el se disculpó y me llevo al patio trasero de su casa que por cierto es demasiado grande, y cuando digo demasiado no exagero en lo absoluto, solo la sala parece mi casa y el patio, Dios el patio es inmenso me enamore de los columpios que se encuentra en el.

— ¿En qué piensas?.

Peyton estaba a un lado de mi en la acera frente a nuestra casa, llevaba un hermoso conjunto color Rosa, ella era físicamente un poco diferente a mí, ojos color plomo, un hermoso color, de piel pálida y cabello por lo hombros color negro.

La observé por unos segundos antes de responder junto con un encogimiento de hombros.

— Tengo muchas cosas en la mente ¿Sabes? ….. y a veces siento que de tanto pensar se me va a reventar el cerebro.

— Pues entonces no pienses tanto, te hace daño y lo sabes.

— No es como si pudiera dejar de hacerlo….. simplemente comienzan a llegar pensamiento tras pensamiento y no sé cómo alejarlos.

Ella me observo con los ojos entre cerrados y el celo fruncido, sus labios estaban un poco separados, estaba a punto de hablar pero luego apareció Melanie y Carmín, ambas estaban vestidas con ropa de gimnasio.
Se pararon frente a nosotras y con una gran sonrisa la primera en saludar fue Carmín.

— Hola chicas ¿Cómo están?.
Yo no le respondí solo me quedé mirando la de pies a cabeza así que Peyton fue la que respondió.

— Antes de que llegaran estábamos bien ahora…… no tanto.

— Dejemos las cosa por la paz Peyton — Melanie fue la que hablo esta vez con un tono un poco alto — seamos amigas como antes, todos contentos errores.

Peyton la miro por unos segundos y luego se levantó hasta que quedó a su misma altura la observó un poco más y luego hablo — Tienes razón Melanie, es momento de dejar todo atrás.

En ese momento ambas se abrazaron y Carmín se les unió, duraron así un par de minutos y luego Carmín me observó y al mismo tiempo estiró una de sus manos hacia a mi, yo la mire más de lo que debía y ¿Para que negarlo? Yo también la extraño. Me levanté con la ayuda de Carmín y me uní al abrazo.

pintando nuestro Amor © [En Proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora