pintando nuestro Amor © [En Proceso]

capitulo 7

Axel

— ¿Te encuentras bien? — la voz de mamá me devolvió a la realidad. Ella se encontraba al otro lado de la enorme oficina de un empresario que estaba interesado en hacer negocios con ella.

— No, pasa mamá. Es solo que me duele un poco la cabeza — le respondí sin mucho ánimo y luego volví a la misma posición de antes.

— Te noto muy extraño ¿Ocurrió algo con la chica que te ibas a ver?.

Ante las palabras de mi madre vino de nuevo la horrible sensación del rechazo de Emma hacía mi. Era como si estuviera viviendo el momento una vez más y se sentía como si me hubieran pasado un camión por encima, como si un montón de abejas me estuviesen persiguiendo para hacerme sentir dolor con sus picaduras.

Nunca antes me había dolido un rechazo de una chica que me gustará, pero está vez era muy diferente, sentía un enorme vacío en el pecho, mi cabeza daba vueltas pensando una y mil razones por la cuál ella me había rechazado. Había dicho que no estaba preparada para una relación, y la entendía muy bien, pero aún no entendía porque no me daba un oportunidad para demostrarle que yo soy diferente, que no soy como los demás.

¿Valdría la pena intentarlo de nuevo?.

¿Pero y si volvía a rechazarme?.

Mejor dejaba las cosas como estaban para no molestar con mi actitud tan posesiva, era mejor darle su espacio para que ella pudiera estar tranquila y pudiera pensar mejor la cosas.

— Hola buenas tardes — un hombre alto de piel morena se hizo presente en el lugar, llevaba un elegante traje color vino tinto, se acercó hasta mamá y le dio la mano — es un gusto conocerla.

— El gusto es todo mío — le respondió ella con una pequeña sonrisa y luego me miró a mí y le hablo al hombre — y él es mi hijo Axel.

Me acerque hasta donde se encontraba mamá con el hombre y le extendí la mano a lo que él se presentó — Mucho gusto Axel, yo soy Gonzalo Miller.

— Es un gusto Gonzalo.

— Bueno pues tomen asiento y comencemos.

Ambos lo hicimos y de inmediato él y mamá comenzaron a hablar sobre cuadros y todo esa clase de cosas que ya me estaban comenzando a colmar la poca paciencia y para colmo mi teléfono comenzó a sonar avisando que era un llamada. No quería responder porque a pesar de estar aburrido con el tema de conversación era muy importante, así que decidí ignorar el teléfono hasta que dejara de sonar pero era imposible ya que no paraba de hacerlo. Mamá me observó al igual que el hombre y de inmediato ella hablo.

— Corazón responde o el pobre aparato se va a fundir de tanto sonar— me dijo ella con un tono un poco bajo y también con un poco de pena.

Yo solo asentí y me levanté del asiento. Salí de la oficina y saque el teléfono del bolsillo de mi jean, al mirar la pantalla y darme cuenta de quién se trataba sentí un enorme vacío que no sabría cómo explicarlo, era extraño después de lo sucedido me estuviera llamando como si nada. Quizá para ella no fue la gran cosa, pero para mí si que lo fue.

Un hormigueo se estaba apoderando de mis manos, una sensación muy fuera de lugar se apoderaba de mí y de todo mi ser, mis pensamientos eran un caos total y no sabía que pasaría al contestar esa llamada, sin embargo; tome una muy profunda respiración y contesté.

Yo:¿Hola? — lo hice sin mucho ánimo.

Emma: Axel…… solo quiero saber ¿Estás bien?.

Por su voz me provocaba Miles de emociones que jamás había sentido, era como si estuviésemos conectados pero justo ahora solo yo podía sentir esa conexión. Mi corazón latía a un ritmo muy acelerado.