Fue un día de suspenso ayer, y una noche de más suspenso.
Cuando desperté en clases, los relojes derritiéndose se habían ido. Estaba en la escuela, y eran casi las tres en punto. Sabía lo que tenía que hacer, tan pronto como la escuela terminara. Tenía que encontrar a Pranpriya.
Comencé por el metro. En el sueño, Kendra dijo que buscara donde ya había buscado. Sabía que era solo un sueño, pero había parecido tan real que decidí seguir su consejo.
Pero por la noche, estaba frustrada. Decidí ir por la posibilidad más remota, fuí de regreso al departamento, ver si mi papá estaba allí, si él podía decirme dónde estaba Pranpriya. Tal vez lo haría si pensara que Pranpriya le daría dinero.
Salí del metro y casi estaba en mi departamento. Estaba oscuro, casi las diez. Corrí rápido.
Fue entonces cuando alguien me agarró.
-¿Dónde está él? -demandó una voz. No podía ver su rostro, pero la voz era un bajo gruñido en mi oído, y sentí algo duro, un arma, contra mi espalda.
-¿Dónde está mi padre? -Me sorprendido lo tranquila que estaba.
El hombre maldijo.
-Él me debe.
-No lo sé. -Pensé en Kipling. Si puedes mantener tu cabeza... le dije al tipo-: No lo he visto, pero le diré...
-Guárdalo. Bastardos como él pueden desaparecer sin un rastro.
¿Ya no lo sabía yo?
Él empujó el arma contra mí.
-Quiero el dinero de ti. Ahora.
No lo tenía. Pero no podía decirle eso, así que dije:
-De acuerdo. Tengo que ir de nuevo a mi departamento para conseguirlo. Si tan solo...
Y, de repente, sabía exactamente dónde estaba Pranpriya. La casa. La del Parque Slope con el invernadero muerto. Todo tenía sentido. Si se había quedado fuera de la ciudad por tanto tiempo, ella no habría respondido a la puerta. Aún cuando había conseguido a alguien que atendiera las plantas, esa persona podría haberlas dejado morir. Sabía que ella estaba allí.
-Tengo que ir en metro -dije.
El tipo comenzó a llamarme cosas que no puedo soportar escribir aquí.
-No juegues conmigo. Sé dónde vives. -Con el arma, me forzó a ir hacia mi propio departamento, el último lugar en dónde quería estar atrapada.
Aún así, entré y pretendí hurgar en los cajones, en los armarios, buscándolo, diciendo cosas como:
-Él solía mantenerlo debajo del colchón. -Durante todo el tiempo, quise gritar por Pranpriya. El tipo estaba comenzando a impacientarse, y dije-: Si solo me dejaras llamar a mi novia...
-¿Novia? ¿Y que ella les diga a la policía? No lo creo
-Ella no lo haría. Ella te daría el dinero. Haría cualquier cosa por mí.
Nunca debí haberme dejado atrapar de nuevo en este mundo.
-Tú no vas a ninguna parte -dijo el tipo.
A pesar del arma, traté de liberarme. Él estaba entre mí y la puerta, así que me lancé a la ventana abierta y grité a la calle oscura, grité el nombre de Pranpriya. A pesar que sabía que no podía escucharme, mi temor y amor y desesperación se combinaron para arrancar el sonido de mi garganta. Pensé en Jane Eyre, cuando Jane escucha el grito angustiado de Rochester a través de los páramos. Estaba buscando magia.
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Eʟ ᴅɪᴀʀɪᴏ ᴅᴇ Jᴇɴɴɪᴇ (Bestial)
FanfictionJennie, es estudiante en Tuttle, donde prácticamente es invisible salvo para los profesores puesto que todos allí son hijos de personas famosas e importantes; algo que no es ella. Jennie nos cuenta a través de su diario lo que siente y lo que pasa...