Eʟ ᴅɪᴀʀɪᴏ ᴅᴇ Jᴇɴɴɪᴇ (Bestial)

𝟹𝟷 𝑑𝑒 𝐷𝑖𝑐𝑖𝑒𝑚𝑏𝑟𝑒

La respuesta es sí.

Si. La amo lo suficiente. La amo tanto que nada más importa, ni lo que todo el mundo piensa, ni la normalidad, ni conformarme a alguna imagen de cómo la gente debería lucir o ser, ni siquiera el hecho que, si voy a estar atrapada aquí, quizá por siempre. Eso no importa. Después de todo, a diferencia de mi padre, no es la culpa de Pranpriya que ella sea así. Ella no es débil como mi padre. Más bien, ser así la ha hecho más fuerte.

Cuando llegué a su casa por primera vez, hice un gran alboroto, cada noche, bloqueando mi puerta para que ella no pudiera ser capaz de entrar, de no atacarme. Ahora, sé que ella jamás haría algo así. Ya no cierro mi puerta. Me siento segura. Nunca pensé que entraría.

Pero anoche, hacía más frío de lo usual cuando fui a la cama. Más amargo, realmente. Y después, cuando me desperté, el aire de la noche mordió mi piel.

Entonces sentí una manta extra depositada en mi.

Vi su forma. Sabía que era ella, pero pretendí estar dormida. La escena era tan íntima. Aún así, me sentí cálida por algo más que la lana.

Me acurruqué en esa manta y supe que podía quedarme aquí por siempre. Algún día, no solo lo dejaré entrar a mi cuarto. Lo invitaré.

Algún día... Pronto...