— ¡Papá! — dijo Max.
— No se preocupe no me afecta en lo más mínimo — es la verdad.
— Sabes hay algo raro o curioso.
— ¿Que cosa? — cuestioné.
— Eres parecida a ella — sonreí algo incómoda, preferí no responder y seguir comiendo.
— No se parecen en nada — dijo que Max y lo observé para que se calmara y no siguiera hablando.
— Zaid porfavor come — insistió Claire al pequeño.
— Ya estoy lleno quiero ir a jugar.
— Llévalo a su cuarto de juegos — dijo Ross y Claire desapareció por un pasillo junto con Zaid.
— Señora Navyn esta comida está deliciosa — halagué su cena.
— El curso de cocina debía servir de algo.
— Eso es maravilloso.
— ¿Tu sabes cocinar? — cuestionó Ross.
— Obvio sé cocinar de todo un poco.
— Quisiera probar alguna de tus comidas para saber si es más buena de las que he provado — él definitivamente me está retando, Esme sé paciente respira él solo intenta provocarte.
— Será un gusto preparar algo para usted — si sigue así el sazonador de la comida será veneno de ratas.
— Me caes muy bien eres muy directa jaja eso lo tienen pocas personas, papá deberías invitarla a tu cumpleaños — Comentó Thom.
— Aún ni se reparten las invitaciones.
— Claro que ella vendrá — dijo Max y le sonreí.
— ¿Ustedes ya viven juntos? — Ross no para sus preguntas.
— No — respondí de inmediato.
— ¿Que tiempo tienen saliendo? — esto es un interrogatorio.
— Tres meses y una semanas — respondió Max con una sonrisa.
— Así es — afirmé su respuesta.
— Que raro — no entiendo a que quiere llegar con todo esto.
— ¿Porque?
— Porque Max cuando apenas tenía un mes o tres semanas con Fabiana ya vivían juntos.
Esto está colmando mi paciencia.
— A ver señor no quiero faltarle el respeto pero yo soy Esme no veo a ninguna estúpida Fabiana cenando con usted y si va a seguir comparandome hágalo, su hijo y yo tenemos una relación muy diferente — por fin lo dije.
— Si, Fabiana era muy diferente no era una altanera.
— Papá ya basta deja de nombrarla — dijo Max algo molesto.
— Conozco a mi hijo y se que aún ama a Fabiana.
— Que equivocado que está, lo tiene tan cegado el dinero que ya ni conoce a sus propios hijos — necesitaba decirlo.
— No me faltes el respeto — pidió Ross cuando él no lo hace.
— Empiece respetándome para que reciba lo mismo — no me voy a quedar callada ante todo esto.
— Eres una... — podía ver el enojo en sus ojos.
— Una ¿qué? Sea machito y dígame las cosas de frente — esta sacando mi peor lado.
ESTÁS LEYENDO
Mi Pasado
FanfictionEsme Levy decide tomar sus maletas en busca de sus sueños y cumplir sus metas, pero no todo es color de rosa. Todos tenemos un pasado y ese es su mayor miedo.