Marry | Seongsang

✨0.1✨

¿Que había hecho mal Yeosang para que lo obligarán a casarse con un desconocido?

Es que vamos, ni siquiera lo había visto ¿Como era eso posible? Nadie se casa si no hay amor, mucho menos si jamás se han visto la cara, sin embargo estaba allí en esa sala vestido de blanco esperando por su infelicidad. Cualquiera que lo viera podía darse cuenta que no estaba para nada feliz, su aroma lo delataba, estaba triste y se encontraba arruinando su maquillaje por décima vez en el día. La maquillista sentía pena por él, pero no más que él, sentía tanta lástima por él mismo.

Con un profundo dolor en su alma, con su lobo interno con sus orejas abajo, quitó de su dedo el anillo que allí había. Aunque era barato significaba mucho para él, porque por un corto tiempo lo hizo feliz de verdad, una felicidad que ningún alfa le daría. Siempre quiso casarse con el alfa que amaba, que su boda hubiera sido especial, pero todas sus ilusiones se fueron  a la mierda con su corazón. El sentimiento de rabia y odio ocupaba su ser ahora. Entendió que el dinero es capaz de arruinar a las personas de diferentes maneras y lo estaba haciendo con él de la forma más cruel. Su familia nunca fue la más rica, ni la más pobre, jamás le faltó algo, vivían felices, pero ya saben lo que ocasiona la ambición.

ー¿Por que estás llorando ahora muchacho? --. Uno de sus padres se acercó a él para limpiar sus lágrimas rápidamente sin estropear aún más su maquillaje. Sus manos estaban temblando, no quería salir y nadie podía ayudarle. Quería escapar pero no podía, donde fuera lo encontrarían, la gente con poder hacia lo necesario y su familia saldría perjudicada.

ーNo quiero... No quiero hacerlo papá. --. Suplicó, tomando las manos de aquel ser que lo trajo al mundo. Que alguna vez fue su confidente, quien siempre lo apoyaba sobre todas las cosas.

ーTe hemos conseguido un buen marido y con poder. Te dará una mejor vida, la vida que te mereces, la de un rey. --. Sus mejillas fueron tomadas por las pequeñas manos de su papá, acariciándole con dulzura, pero enrealidad se sentía tan agria. --. Es la vida que siempre quise para ti mi cielo. Ahora ve.

Fue empujado. Tenía miedo por el alfa que le fuera a tocar, quería llorar tanto hasta morir. Detrás de él siempre habían alfas de todas las edades queriendo cortejarlo, no le sorprendería que pasara, mucho menos de un hombre rico. A su alrededor habían tantas personas pero a los únicos que conocía eran a sus tres amigos que lo miraban igual de tristes. Su vida se desmoronaba rápidamente. Las flores que tenía en su manos se movían levemente y varias lágrimas cayeron sobre ellas. Miró hacia adelante, logrando ver la espalda de un delgado y alto alfa que lo esperaba en el altar.

Su padre le dio una mirada amenazante antes de dejarlos allí justo al lado del desconocido, con eso entendió que sería su final. Entonces le miró por primera vez, abriendo sus ojos con sorpresa y colocando cara de terror. Olvido como se respiraba, incluso quería volver a llorar. Esa cara inexpresiva hizo que todo su cuerpo se congelara y una herida cerrada hace años volviera abrirse. Vaya que tuvo que crecer para ver el lado malo de sus progenitores para tener que casarse con aquel ser vivo. El juez frente a él fingió una sonrisa y luego les entrego un bolígrafo antes de hablar.

ーEstamos aquí para darle inició a la unión entre Park SeongHwa y Kang Yeosang. --. Yeosang sintió como una gotita de su sudor bajaba por su sien hasta su mentón. Olfateando su aroma y colocando cara de disgusto.

Su aroma no era agradable o quizás se negaba aceptarlo, jamás sintió su aroma hasta ahora. Sus aromas reflejaban sus emociones y el de al lado estaba molesto, algo que era muy mala señal para él. Oh, de tan solo pensar que estaba dejando a alguien con el corazón roto le hacía sentir miserable, bueno, ya lo era con estar allí parado sin escuchar lo que decía el anciano del frente. Solo esperaba que todo durará poco y pudiera regresar con quién verdaderamente amaba, su verdadero alfa.

Al momento de firmar, el hombre al lado suyo por poco rompe el papel si no fuera por el juez quien lo retiro a tiempo. Y cuando llegó su turno tomó el bolígrafo mirando aquella parte que decía firma. Detuvo el objeto allí, dudando con hacerlo o no. Miró al juez y este parecía hablarle con la mirada que lo hiciera rápido ¿Y lo hizo? Por supuesto que sí, con todo el dolor del alma lo hizo, escuchando después algunos absurdos aplausos que provenían de sus padres.

ーPuede besar a su Omega.

El alfa se dió vuelta para mirarle a la cara por primera vez. Yeosang entró en pánico cuando esté lo tomó del cuello y lo hizo acercarse a la fuerza. Puso toda su resistencia para que aquello no sucediera, apretando sus labios en una línea y negando desesperado. Nadie que no fuera el ser que amaba, su alfa, su verdadero alfa, podía tocar sus labios, nadie. Pudo sentir la respiración ajena con la suya mezclarse y sus mejillas se pintaron de rojo por la vergüenza.

ーNo te atrevas... No te atrevas... --. Amenazó, tratando con todas sus fuerzas de alejarse de aquel sujeto.

ーTranquilo, es parte de esta farsa. --. Y le sonrió con malicia, una malicia que hizo temer al pobre Yeosang.

Sus labios se rozaron y sus ojos se cerraron, esperando el beso que jamás llegó. En su lugar, el alfa le soltó del cuello y cayó de espalda sobre el pastel de bodas que un ser maligno había dejado allí. Cayendo frente a cien personas y diez cámaras que filmaban todo.

Este es el triste matrimonio de Yeosang. No pensaba que se casaría con un idiota como ese.

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Sean bienvenidos a esta humilde historia. Luego del desastre anterior... Espero que sea de su agrado y le puedan dar una oportunidad a marry.

¡Gracias por leer!