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𝟬𝟮🂱 𝙒𝘼𝙆𝙀 𝙐𝙋 𝘾𝘼𝙏𝙃𝙀𝙍𝙄𝙉𝙀.

Mis ojos se abrieron ante el sonido de la alarma, al parecer siempre será a la misma hora, 7 A.M, me levante y dispuse a ponerme mi uniforme, mire la bolsa que me habían dado anteriormente la cual se encontraba con cosas básicas de la higiene.

Uno de los guardias tocó la puerta minutos después, pregunto si estaba lista para ir a trabajar a lo cual dije que si, era algo raro e incomodo estar de alguna manera encerrada por un simple trabajo, no entendía porque había aceptado el trabajo hasta ese punto, pero de cierta manera había algo que me atraía aquí desde que supe que necesitaban a alguien para cuidar la salud mental de los niños...

Digo, no odio a los niños, pero tampoco son mis favoritos, aunque su pequeña mentesita es más propensa a ser lastimada que a la de un adulto...

El pitido de la puerta abriéndose me saco de mi trance, me llevaron de nuevo hasta el área donde las paredes eran de arcoíris, a excepción de que no había ningún niño en ella

Mire como el guardia cerraba las puertas y al parecer las cámaras no estaban funcionando, ya que no emitían su icónica luz en el lado derecho, antes de poder pensar algo más una cabellera rubia llamó mi atención...

—Despertaste temprano...—Mencionó al verme levantada

Giré mi cuerpo hacia esa nueva voz y conteste

—A esa hora sonó la alarma y el guardia vino por mi...—Conteste

El golpeó suavemente su cabeza y rio

—Olvide por completo que ambos vamos a trabajar juntos, por eso ambos estamos despiertos...—dijo tomando un par de cubos del lugar

Estiró ambos cubos hacia a mi, los cuales yo tomé y mire confusa

—¿Tenemos que acomodarlos?—Pregunte

—Si, solo que debes de acomodarlos en cada número de paciente, en este caso estos 5 van con la de allá.—Señaló un cajón con un número

Tome los cubos y los puse en donde me había indicado

Once...

Leí en aquella caja, al parecer los niños les gustaba jugar con esto

—¿Sabes para que es esto?—Pregunte hacia el

—Al parecer no te han dicho realmente de qué consiste el empleo...—Dijo hacia a mi

Lo mire extraño y él nuevamente me llevo al cuarto que estaba en el mismo cuarto arcoíris, el espacio era reducido ya que generalmente es de mantenimiento al parecer pero eso no evito que me pusiera nerviosa ante su cercanía

—Los niños aquí no son normales...—Mencionó

—Lo se, están enfermos.—Conteste

El río y dijo

—Son mucho más fuertes y valiosos que lo que es uno enfermo...—Dijo mirándome fijamente

—Ellos tienen habilidades Catherine...—Miro mis labios—No son como tú—termino

—¿Acaso tú eres como ellos? ¿O porque solo me generalizas a mi? ¿También estás enfermo?—dije con confusión

—No, me refiero a que ellos tienen habilidades que cualquier otro ser humano desea. Poderes Catherine, ellos tienen poderes.—término

una carcajada comenzó a salir de mi

—¿Estas intentando ligarme? Porque créeme que te salió muy bien haciéndome reír...—Dije con ironía

—No necesito hacerte reír para ligarte Catherine...—Contesto acercándose a mi

Mi cuerpo comenzó a sentirse caliente y nervioso así que por reflejo me hice para atrás como reflejo, a pesar de que no había más espacio

—¿Es broma verdad? Ellos no pueden tener poderes...—Dije

—No, no lo es, ahora estás atrapada como ellos, estamos en una cárcel, ninguno de los que trabaja aquí puede salir debido a el secreto que cargamos cada uno..—Dijo

—¿Recuerdas lo que te inyecte en el cuello? Bueno, es un localizador...—Dijo

—No lo recuerdo muy bien porque estaba bastante concentrada en lo impactante que es tu voz...—Dije sincera

El río y dijo

—Eres muy bonita Catherine, pero por desgracia no están permitidas las relaciones entre los empleados del laboratorio—Mencionó con una mueca sarcástica

—Si nadie se entera no habría regaño...—Mencione acercándome a él

—No lo entiendes...—Dijo—Nos vigilan la mayoría del tiempo, es imposible y peligroso para ambos, sobre todo para ti.—Termino

El salió del pequeño cuarto, salí después de él para poder saber más cosas de este lugar pero antes de poder decir algo más, varios guardias abrieron las puertas dejándome ver a todos los niños que entraban al cuarto con Peter y conmigo

Mire que Peter se había alejado con uno de ellos, al igual que una niña en específico llamaba mi atención, fue a la que le puse los cubos en la caja

—¿Once?—Dije hacia ella

La pequeña me miro sorprendida y dijo

—No te había visto antes, Papá no me contó de ti...—Dijo temerosa

—Un gusto once, soy nueva aquí, me llamo Catherine.—Dije en una sonrisa

—¿Te puedo llamar por tu nombre o debo llamarte enfermera?—pregunto con tristeza

—Soy Psicóloga pero puedes llamarme como te sientas más cómoda.—Sonreí

—Gracias Catherine, nos da miedo algunas veces llamarlos por su nombre real, creemos que nos regañaran...—Mencionó con tristeza

—¿Y como llamas al rubio de allá?—Señale a Peter el cual me miraba confuso

—El es amable conmigo, le digo Peter, siempre me ayuda en ciertas cosas...—Sonrió mientras hablaba

—¿Tienes un nombre aparte del número?—Pregunte

Ella negó con tristeza

—No tenemos nombre, solo el número que tenemos en nuestras muñecas...—Dijo mientras me enseñaba su número tatuado

Me sorprendí un poco, ¿Aguantaría tanto tiempo en este laboratorio sin morir?

—Buscaremos un nombre para ti después...—Dije mientras la ayudaba con sus cubos

Voltee a ver a Peter el cual no dejaba de mirarme desde que había establecido una conversación con once, su mirada parecía preocupante y curiosa, tiempo después el se acercó a mi.

—No digas nada, vendrás conmigo.—