( cientifico au )
Advertencia, este capítulo toca temas, como el tráfico de humanos y experimentación humana, lean con precaución y bajo su propio riesgo, disfruten el capítulo byy.
En una esquina de aquella fría habitación, un habitación acolchada, como si fueran almohadas, almohadas grandes y blancas pegadas a esas cuatro paredes.
Ahí estaba ella, con unas ojeras que parecían bolsas de basura, una piel blanca y un cuerpo flácido y sin vida, aunque intentará escapar, su pequeño y frágil cuerpo no se lo permitirá.
Se encontraba allí justo por eso, intentar escapar, pero al ser tantas veces los internos y haber fracasado todos y cada uno de ellos, los doctores se cansaron, la encerraron allí dentro, en una camisa de fuerza, con una habitación acolchada y un gran e impotente espejo.
Su dieta consistía en unas barritas sin sabor alguno, agua, y zumos de diferentes sabores.
Desde hace años ella está allí, digamos que su madre no fue la más responsable del mundo, y a una edad muy joven quedó embarazada, pero al contrario de todos esos clichés ella la amaba muchísimo, más que a su vida, pero sus abuelos no. La vendieron a un laboratorio de pruebas, por un buen precio la corta edad de seis años.
Desde ese momento se transformó en un conejillo de indias, recibiendo un montón de vacunas en fase de pruebas, químicos y múltiples píldoras, para ver sus efectos secundarios y para testear que funcionaran correctamente.
Obviamente todo eso trae consecuencias, su pequeño cuerpo no pudo con tantas pruebas y pastillas. A los doce años fue su primera intervención cirugíca.
A los catorce años empezaron sus intentos de escape.
A los dieciséis, perdió todo tipo de libertad, la encerraron allí y se le asignó un doctor.
Ah sí, ese doctor, lo considera desde hace mucho su único amigo, al fin y al cabo, era el único que la trataba bien.
Ay estaba el dilema de nuevo, ¿ La trataba bien porque es su trabajo, y su obligación ?
Una pregunta que le rondaba por la cabeza desde hace mucho, pero la desesperación de tener aunque sea un amigo, le hacía olvidar.- Buenos días, ¿Cómo te encuentras hoy, querida?
Entro en la sala de nuevo, después de horas, con su característica bata blanca.
- Muy bien - dijo apuntado en un cuaderno -con eso ya sería todo por hoy, querida.
Dejo el cuaderno, para mirarla a ella, tenía una expresión feliz en su inexpresivo rostro.
Con pasos lentos se dirigió a la salida, le dió una última.
-Adiós pequeña, nos vemos mañana.
Dijo en un tono juguetón, antes de irse definitivamente. Ella solo suspiro, una sonrisita se asomó por su frágil cara.
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♡๑ Çrå¢kêÐ Hêår† ๑♡ |𝐃𝐫𝐞𝐚𝐦 𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐫𝐭𝐬 |
Fanfiction«𝐿𝒶 𝒸𝓊𝑒𝓈𝓉𝒾ó𝓃 𝑒𝓈 𝓆𝓊𝑒 𝑒𝓈 𝒹𝒾𝒻í𝒸𝒾𝓁 𝒹𝑒𝒿𝒶𝓇 𝓆𝓊𝑒 𝓁𝑜𝓈 𝒸𝓊𝑒𝓃𝓉𝑜𝓈 𝒹𝑒 𝒽𝒶𝒹𝒶𝓈 𝒹𝑒𝓈𝒶𝓅𝒶𝓇𝑒𝓏𝒸𝒶𝓃 ; 𝒶 𝒸𝒶𝓈𝒾 𝓉𝑜𝒹𝑜 𝑒𝓁 𝓂𝓊𝓃𝒹𝑜 𝓁𝑒 𝓆𝓊𝑒𝒹𝒶 𝓊𝓃𝒶 𝓂í𝓃𝒾𝓂𝒶 𝑒𝓈𝓅𝑒𝓇𝒶𝓃𝓏𝒶 𝒹𝑒 𝓆𝓊𝑒 𝓊𝓃 𝒹í𝒶...