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- ¡No los quiero cerca de ella! - demanda con histeria Addison mientras tomamos nuestras cosas para salir lo mas pronto de ahí - ¡Les estoy hablando! - grita sosteniéndome por mi chamarra impidiendo que avance haciéndome enfurecer

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- ¡No los quiero cerca de ella! - demanda con histeria Addison mientras tomamos nuestras cosas para salir lo mas pronto de ahí - ¡Les estoy hablando! - grita sosteniéndome por mi chamarra impidiendo que avance haciéndome enfurecer

- Te estas volviendo loca Addison - digo con dureza haciendo que sus ojos se llenen de lagrimas pero ese chantaje ya lo conocía a la perfección así que lo único que hago es zafarme de su agarre para salir tras Leonardo y Azael

Nuestra vida había cambiado drásticamente desde hace nueve meses, Addison llego a nuestras vidas haciéndonos caer en una tonta ilusión y una estúpida admiración hacia ella dejando a nuestra pequeña a un lado, los demás tomaron la decisión de firmar el rechazo por aquel bebé que estaba en medio, duramos viviendo como una familia durante un mes en el que Addison cada día nos ponía una versión de Ashia que hasta ahora comprendemos que jamás existió.

Mi pequeña renuncio y decidió alejarse dejándonos el camino para "ser felices" pero mi vida se había convertido en un maldito infierno en el que no sabia como salir, cometimos el maldito error de firmar el matrimonio con Addison haciendo esto un maldito negocio del que nadie podía salir por amenazas de suicidio, amenazas que comenzaban a cansarme y que estaba seguro en poco tiempo mas me importarían un carajo.

- Juro que estoy a mi limite de esta estupidez - gruñe Leonardo con molestia mientras subimos a la camioneta

- Hablare con el abogado - demando mientras pongo en marcha hacia la central de la FIE

- Quiero a esa loca fuera de nuestras vidas - demanda Azael con molestia

- ¿Qué creen que este haciendo ella en estos momentos? - pregunta Leo después de permanecer en silencio por unos minutos

Esa era la misma pregunta de siempre, todos los días preguntábamos eso imaginándonos lo que ella estaría haciendo.

- Estoy casi seguro que estaría preparando el desayuno - dice Azael con una sonrisa mirando la hora haciéndonos sonreír

- No, ella estaría pintando, era una costumbre que tomo después de preparar su cuarto de pintura - digo recordándola salir de la cama silenciosamente pensando que nadie la sentiría para después ponerse a pintar mientras veía amanecer

- Seth tiene razón, siempre la encontrábamos ahí antes de el amanecer - dice Leo sonriendo

Ashia.... ¿Aun te acordaras de nosotros como nosotros de ti?

El recuerdo de Seth abrazándome por la espalda mientras pintaba llega a mi mente, pero lo bloqueo rápidamente continuando con mi entrenamiento siendo vigilada por el general y mi coronel

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El recuerdo de Seth abrazándome por la espalda mientras pintaba llega a mi mente, pero lo bloqueo rápidamente continuando con mi entrenamiento siendo vigilada por el general y mi coronel.

- ¡Cincuenta mas teniente! - grita mi general haciendo que siga con las lagartijas poniendo mi atención en el dolor de mis brazos y la respiración acelerada del cansancio, pero prefería esto que recordar cosas que me hacían mal, cosas que necesitaba arrancar de una vez

- ¡Una mas Alba! - grita Gabriel cuando ve que mi cansancio ya esta rebasando mis limites pero no demostrare debilidad, necesitaba ser la mejor para poder ser la mejor para mi misma

- Buen trabajo Teniente - dice el general acercándose cuando termino y me pongo en posición frente a ellos

- Gracias señor - digo con una sonrisa haciéndolo sonreír a él

- Estas lista para dirigir un escuadrón, así que felicidades Capitán - dice haciendo el saludo que desde que entre he soñado con tener.

- Se lo agradezco General - saludo conteniendo las lagrimas de alegría

- Mañana será su ceremonia así que alístese - dice para después alejarse

- Eres mi orgullo - dice Gabriel abriendo sus brazos para que me tire a ellos y así lo hago

- Gracias por todo Gabo - digo en su oído haciéndolo reír al escuchar mi ridículo apodo que no le decía desde hace años

- No puedo creer que haya extrañado ese ridículo apodo - dice riendo mientras gira conmigo en medio de aquel campo de entrenamiento solitario haciéndome reír

ALBA (2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora