En algún lugar estoy.
No pueden tocarme así como no se puede tocar el amor... pero si es posible sentirlo.
No me encuentro entre la tierra.
Estoy en la sonrisa de sus recuerdos.
Estoy en cada uno de sus suspiros.
Estoy en la carita de quien ha nacido.
¿Si escuchan el eco que se produce cuando él ríe?
Ese soy yo.
Créanme que estoy.
No tan lejos. No me encuentro tan lejos.
Estoy cerca, muy cerca, a su lado.
Los sostengo cada vez que alguno quiere caer.
No es posible matar un sentimiento.
Solo muere quien es olvidado.
Los cuido, los protejo, los acompaño, no me he alejado solo me adelante un poco a sus pasos.
Pero no se preocupen que estaremos juntos.
Nueve meses, nueve meses en los que el maldito dolor no se iba si no todo lo contrario incrementaba, incrementaba tanto que cada día pedía morir, pedía estar con ella a su lado sin importar nada.
- Hermano es hora - dice Maddox entrando a la habitación
- No quiero - digo mientras las lagrimas corren por mis mejillas
- Nadie lo quiere pero es hora - dice acechándose para abrazarme
- Tengo miedo - digo
- Todos lo tenemos, es lo ultimo así que te esperamos en la sala - dice alejándose para dejarme solo en esa pequeña habitación donde debía cambiarme
Después de hacerlo me dirijo entre los pasillos hasta que encuentro la entrada a mi futuro, un futuro doloroso o feliz.
- ¿Se encuentran listos? - pregunta el hombre frente a nosotros
- Puede comenzar - dice Kemal
Cada quien toma su puesto para comenzar.
- Bien aquí vamos, la primera será en diez segundos - dice mientras nosotros esperamos con ansias y terror el momento
- ¡AY! - el grito de dolor junto con esos ojos que tanto extrañaban hace que mi llanto incremente al igual que mi alegría aumente
- ¡Señora Escamilla se encuentra en labor de parto necesito que lo tome con calma y nos ayude a traer al mundo a sus bebes! - le pide el doctor con una gran sonrisa
- ¡Mason! - grita cuando otra contracción llega haciendo que me acerque rápidamente a ella para tomar su mano junto a mis hermanos rodeándola
- Tranquila amor todo estará bien - digo uniendo nuestras frentes mientras mis lagrimas no pueden dejar de salir
- No entiendo que ¡SUCEDE! - grita cuando otra contracción la ataca
- Nueve meses cariño, nueve meses en coma y la unica esperanza para traerte a la vida eran nuestros hijos - dice Maddox con rapidez
- ¿Cómo paso? - pregunta mientras llora del dolor
- Te lo explicaremos todo pero ahora trae a nuestros hijos a la vida como ellos te trajeron a ti - dice Kemal besando su frente
Y es entonces que así comenzó el parto de nuestros tres hijos, nuestros trillizos que regresaron a la vida a su madre y a sus padres sin siquiera saberlo.
Nada es perfecto, ni eterno, a veces el camino que recorremos deja cicatrices, cansa y hiere, algunas veces no es justa ni fácil, pero a pesar de todo, la vida es bella, tan bellísima que puede llegar a sorprendernos. Como a nosotros nos sorprendió la llegada de mi pequeña y la de mis tres campeones Emre, Emilio y Eider.
CHICOS Y CHICAS!!!
Estoy tan emocionada!!
Espero y les haya gustado el final y si no pues espero que no me comenten cosas muy feas jejeje solo espero que esta travesía a mi lado les haya hecho un poco mas feliz la vida.
Gracias por su apoyo y amor a este libro.
Ian Fuera...
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ALBA (2)
Romance- Tú eres mi luz del día antes de que el sol salga pequeña - dice acariciando mi mejilla con lentitud haciéndome sentir amada como siempre quise por primera vez Una ilusión que escondía una gran verdad, una historia nada igualitaria a lo que cada u...