Femboy Hooters

Competencia De Tamaños

Luego de eso, salimos con Sakura a una peluquería. Allí, además de darme un nuevo corte de pelo, me empezaron a maquillar.

Yo: No veo porqué es necesario hacer todo esto. Creo que es sólo una forma de humillarme.

Sakura: ¿De qué hablas, Cristian? ¿no te parece más placentero tener tu cuerpito depilado y bien delicado?

La realidad era que sí, se sentía extraño pero placentero y, por algún extraño motivo, me daba ganas de abrazarme con una persona mucho más peluda que yo.

Yo: No, para nada. Me siento super humillado y eso eso molesto.

Sakura: Cambia esa cara, Cristian. Al menos tienes un lugar dónde estar ¿no crees?

Yo: No tengo donde dormir, Sakura, anoche la pasé en la oficina del restaurant. No me jodas.

Sakura: Uh, vaya, no lo sabía, es una lástima. Si quieres, mañana puedes quedarte conmigo en casa.

Yo: Gracias, pero creo que podré resolverme solo.

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Pasó un rato más y mi maquillaje ya estaba listo.

Me pintaron los labios de negro, las pestañas y las cejas. Parecía una señorita con mi corte de pelo nuevo. Mis ojos no daban crédito al putito que tenían frente al espejo. Pero todavía faltaba el toque final entonces fuimos a comprar ropa y encontramos enseguida el uniforme de Femboy hooters. Pagamos con tarjeta y salimos.

Yo: gracias por pagar por todo, Sakura.

Sakura: Oh, no lo estoy pagando yo, esta es la tarjeta de la empresa.

Yo: ¿entonces la empresa está pagando por todas estas compras?

Sakura: Oh, no, para nada. Todo esto se cobrará como un préstamo y se te descontará de tu salario con intereses en el próximo mes.

Yo: ¿qué?

No había tiempo para discutir. Ya estaba de nuevo en el Femoby Hooters con mi nuevo look super maricón. La Señora Cumsweet me sonrió lascivamente y se mordió el labio inferior.

Señora Cumsweet: por dios, qué rico cuerpito que tienes. Un día de estos te voy a tener que comer todito.

Yo: ¿Qué?

Señora Cumsweet: Eh, nada, que como te decía: ya solucioné el asunto de tu estadía. Hablé con las camareras y cada una de ellas se turnará para ofrecerte hogar en las próximas semanas. Eso significa que convivirás con cada una de ellas y vivirás bajo sus normas ¿entendido?

Yo: Yo... eh.... ¿gracias?

Señora Cumsweet: Se me olvidaba una cosa más: ponte esto en el culo y saluda siempre con un "Bienvenidos a Femboy Hooters ¿en qué puedo serviros?".

La señora me dió una nalgada y me metió en el culito una especie de pequeño dispositivo.

Me acerqué a las meses todavía atónito por el shock que había tenido en mi ano.

Yo: Buenos días señores ¿cómo les puedo servir?

CONTINUARÁ...