La joven se encontraba empacando sus pertenencias para la mudanza que se daria al siguiente día.
Por fin veía luz en su vida.
Para su mala suerte varios gritos se escucharon en la planta baja, esta se asustó y bajo para ver qué sucedía.
Dos jóvenes bastante cambiados muchos más altos y atractivos, todas las menores los rodeaban preguntándoles como la habían pasado en el reformatorio.
Sus miradas se cruzaron dejando a ambos sin palabras, pues la chica también había cambiado bastante, su cuerpo ya estaba bien desarrollado y se veía mucho más guapa que cuando era pequeña.
Los dos miraban a la misma dirección, Kakucho no pudo evitar como su corazón empezaba a acelerarse al verla por fin.
Sin embargo Izana sintió un revuelo en su estómago, miró hacia su amigo y apreció cómo este miraba a la chica embobado.
Los celos comenzaron a inundar el cuerpo de Izana. Ella quería robarle a su mejor amigo, o al menos así lo pensaba este, desde el momento en el que ella le confesó que Kakucho la beso, el negó esto y siempre pensó que era uno de sus sucios juegos contra el.
La chica en un acto de valentía se acercó a ambos jóvenes.—Hola Kakucho.—Dijo la menor.
Este se sonrojó al instante, sentía el impulso de abrazarla pero sabía que no debía.
—Vaya si tenemos aquí a la puta del orfanato.—Dijo Izana a modo de burla.
La joven lo miro con despreció, volvió a mirar a Kakucho y vio cómo la sonrisa de este se desvaneció, dirigió de nuevo su rostro a Izana.
—Hola a ti tambien pito corto.—Dijo entre risas para luego ir de nuevo a su habitación.Kakucho espero el momento perfecto para escabullirse de Izana y ir a la habitación de la menor.
Al llegar abrió la puerta sin llamar, al entrar vio cómo todas las cosas estaban empaquetadas en cajas.—___— llamó a la chica, esta volteó a mirarlo confundía.—¿Te vas?—Dijo Kakucho confundido.
Esta se levantó y habló.—Si, me voy a un piso tutelado.—Dijo sonriente.
—Yo volví aquí solo por verte, como te prometí.— Dijo el joven nervioso.
La joven daleo la cabeza sin entender del todo las palabras del mayor, hasta que cayó en cuenta de lo que se refería.—Lo se, estoy feliz por eso, pero esta es una gran oportunidad para mi, llevo toda mi vida queriendo huir de aquí.—Dijo la chica sincerándose.—He estado toda mi vida encerrada en 4 paredes sufriendo las humillaciones de tu mejor amigo, incluso después de años aún sigue intentando joderme la vida.—Dijo ___ aguantando las ganas de llorar.
Por impulso Kakucho la abrazo dejando que esta soltara todo lo que tenia dentro.
Pensaban que eran los únicos allí, pero detrás de la puerta un curioso Izana observó todo.
A los pocos minutos de no sentir a su mejor amigo este decidió que sería una gran despedida molestar a ___ como en los viejos tiempos.
Al llegar a la habitación escucho la voz de su mejor amigo. Cosa que lo hizo ser cuidadoso con sus pasos intentando hacerse invisible en ese momento.Las palabras de ___ dejaron una mala sensación en su cuerpo, pero su ego era incorrompible y aquello que dijo sobre el le hizo sonreír.
Sonrisa que fue borrada al momento al ver como su mejor amigo abrazaba a la menor. Para luego besarla.Izana sintió una presión en su pecho, esta fue tanta que agarró con fuerza su camiseta en la zona que le dolía.
Se sentía un idiota mirando cómo se besaban.
Sintió unos celos horribles y por un momento se imaginó que era el, el que ponía sus manos sobre las caderas de la chica atrayéndola más hacia el, quería ser el que la besara ferozmente.
Al darse cuenta de los pensamientos que estaba teniendo negó con su cabeza y salió del lugar.—¿Has oído eso?—Dijo la chica mirando hacia la puerta pero en ella ya no había nadie.
—Debería irme... pero quiero volver a verte cuando te mudes, dame tu teléfono.—Dijo Kakucho intentando no perder el contacto.
...
No se desesperen pronto vendrá lo bueno con Izana.
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Invisible -Izana x T/N
FanfictionEres invisible para mi, no eres nadie. {Enemies to lovers}