Prioridad: ¡SOBREVIVIR! [✔]

Capitulo 16: Nuevo destino

Salieron del hotel camino al coche, Juana abrió la puerta del piloto bostezando.

—Oye, que iba a conducir yo.—dijo Diane con un puchero.

—Pues ya no.—dijo Juana con una sonrisa triunfal mientras entraba dentro.

—Pff—resoplo Diane mientras entraba en el asiento del copiloto.—Bueno, ¿a donde tienes planeado llevarme?—pregunto cuando cerro la puerta.

—¿Que te parece País Vasco?—le pregunto mientras arrancaba.

—No esta mal.—le contesto sin importancia mientras miraba por la ventanilla.

—Venga, no estés enfadada.—le dijo Juana mirándola de reojo mientras conducía.

—Tu has conducido casi un mes entero.—dijo seria con los brazos cruzados.

—Porque estabas herida.—le contesto también seria. 

—Eso no es excusa.—le dijo Juana rodando los ojos.—Vale, te dejo conducir.—dijo cansada mientras paraba el coche y bajaba de el, Diane al verla sonrió triunfalmente y hizo lo mismo.

—Pues hay vamos.—dijo una sonriente Diane mientras arrancaba cuando las dos tenían puesto el cinturón de seguridad.

Al principio estuvieron en un silenció un poco incomodo por la pequeña discusión, pero después de un tiempo empezaron a hablar, a pasar el tiempo, hasta Juana hubo un momento que se quedo dormida apoyada en la ventanilla.

—Juana, vamos a parar un rato despierta.—dijo mientras la movía mientras dormía.

—Cinco minutos mas.—dijo con voz somnolienta mientras intentaba apartarse del causante del meneo. 

—Venga levanta.—dijo moviéndola mas bruscamente, haciendo que abra por fin los ojos.

—¿Que quieres?—le pregunto fulminándola con la mirada.

—Uy no me acordaba que tenias un mal despertar.—dijo Diane mientras contenía su sonrisa.-Bueno te espero fuera que ya emos llegado.-dijo rápidamente mientras bajaba del coche.

—Yo no tengo mal despertar.—dijo indignada.—¿Y donde estamos?—dijo bajando mas lento del coche.

—Por el mapa en teoría tenemos que estar en Santurtzi.—dijo Diane mirando el mapa.

—Muchos barcos.—dijo bostezando mientras miraba el puerto.

—Bueno que se esperaba de un puerto.—dijo levantando los hombros mientras se colocaba al lado de Juana.—¿Que hacemos?—le pregunto mirando a un barco de pinta antigua que parecía mas de decoración que de funcionamiento.

—Ni idea, parece tranquilo pero como dicen la tormenta viene después de la calma.—dijo Juana estirando para terminar de despertar su cuerpo por completo.