Eternidad sin ti (TLoZ: TP, MidnaxLink)

Recordando

Había pasado cerca de una hora desde que Link echó a Ilia de su morada. Se sentía aburrido y fastidiado. Decidió dar un poco de orden a su humilde casa, ya que estaba hecha un desastre. Termino la habitación principal; acomodó la silla que había tirado, coloco unas vacijas en su lugar, tendió su cama y barrió un poco. Ya se veía muchísimo mejor que antes.
Pensó también en darle orden al sótano, hace mucho tiempo que no bajaba por que no llegaba la luz solar hasta ahí y no tenía más velas. Ya ni siquiera recordaba que tenía ahí. Tomo unas cuantas velas que tenía encima de la mesa y otras al lado la cocina.
Bajo con el candil que le había dado el chico de cabello afro que vendía aceite y encendió cada una de las velas. Como pensó, realmente estaba hecho un desastre. Había telarañas por todos lados, todo estaba lleno de polvo y una rata muerta. "¿Esto había en mi sótano? Por las Diosas, que asco" pensó y tomo un trapo limpio para limpiar los estantes y muebles que había ahí.
Ya todo estaba en su lugar, acomodo todo y quito el polvo y las telarañas. Le intrigo un poco saber que tenia en un pequeño mueble de madera con 3 cajones. No recordaba tener algo así, por lo que decidió echar un vistazo.
En el primer cajón estaba un pantalón azul, casi tirando a negro, una camiseta blanca y unas botas. Estas prendas eran muy pequeñas y Link, al hacer memoria, recordó que era la ropa que uso en su infancia. Le dio algo de nostalgia, y la dejo en el lugar de donde la había sacado. En el segundo cajón estaba un alajero muy pequeño. Supo lo que había ahí y a quien le pertenecía. Sus ojos se cristalizaron un poco al abrir la pequeña caja y encontrarse con un collar dorado con una preciosa piedra color morado. Se trataba del collar de su madre. Sabía que si seguía mirando el collar las lágrimas no tardarían en salir, por lo que mejor lo dejo de nuevo en el alajero.
Finalmente en el tercer cajón había muchos papeles, libros y un diario. Dejó de lado los papeles y libros y se enfoco en el diario. Era su diario donde escribía para él mismo. Sonrió al recordarse sentado en su mesa escribiendo. "Me avergüenzo de esto, sólo las señoritas hacen estas cosas" pensó volviéndose a reír de sí mismo. Abrió el diario y comenzó a leer las páginas.
"Día 1.
Estoy asustado, mi madre esta sangrando.
Esta lloviendo muy fuerte, pero por suerte encontramos un refugio para pasar la noche.
Mi madre y yo huimos de casa, yo no entiendo porque, pero papá se veía muy enojado, le gritaba a mi madre y me asustaba mucho, creo que él fue quien le pego a mamá".
"Día 2.
Mamá y yo fuimos a la ciudadela a comprar algo que comer, sentía miedo por alguna extraña razón.
Íbamos camino a la cueva que llamábamos "refugio" para comer pero papá nos encontró. Le gritaba a mamá y la golpeaba en la cara. Tenía mucho miedo. Mamá se veía muy mal, y entre los golpes de papá me dijo que corriera, que corriera muy rápido y me cuidara. También me dijo que ella estaría bien y que algún día nos volveríamos a encontrar. No quería irme sin ella, pero tenía tanto miedo que le hice caso y me adentre en un bosque. Se aproximaba la lluvia y no encontraba refugio. Me senté sobre un tronco y comencé a llorar. Estaba solo. Levante mi cabeza y vi a una niña rubia, es muy bonita. Me pregunto que qué estaba haciendo solo pero no le respondí. Ella llamo a su padre y me llevaron con ellos a un pueblo pequeño. El hombre me hizo contarle sobre lo que me había pasado y me dijo que me quedaría con el un tiempo".