Tu mayor tentación

Celos y Alcohol : Segunda Parte

-¡Jumpol! ¿Por qué eres tan necio?

Le dijo volviéndoselo acomodar y comenzando a lavarle el pelo. Luego que se volvió a inclinar para tomar el jabón y la esponja para bañarlo, Off le pellizcó una nalga sonriendo descaradamente. Gun respiró hondo pensando que él no tenía remedio. Una vez Gun lo hubo aseado por completo, le siguió echando chorros helados de agua por encima, lo cual aunque no le quitó por completo la borrachera, le devolvió algo de tino.

Gun - Off, ahora necesito que te levantes para secarte y vestirte.

Off - Como tú digas, bebé.

Le dijo ya con la voz al menos entendible y dándole un besito que aunque fingió seguir molesto, lo había conmovido bastante, sobre todo porque lo llamó por aquél dulce adjetivo.

Gun - ¡Puff! También necesito que laves la boca, Off. Tú y Mike acabaron con la bodega del bar.

Como un niño obediente, Off se lavó los dientes y luego Gun se dispuso a secarlo. Estaba cuidándolo como a un niño. Le ayudó el mismo a vestirse, escogiendo un pantalón de pijama largo y una camiseta para que no se fuera a resfriar. Se ocupó de secarle bien el pelo. Fue a prepararle un café bien cargado y le advirtió que no se durmiera, dejándolo sentado en la misma butaca. Cuando regresó con el café, lo encontró sentadito como lo había dejado y peleando con el sueño para esperar su café. Gun se recriminó el que aún en esas condiciones el quisiera comérselo a besos.

Gun - Aquí está tu café, off. Te lo acabas todo.

Off - ¿Si me lo acabo todo tengo premio?

Gun - ¿Premio? No te pongo a dormir con el perro porque no tenemos. Vamos, tómatelo.

Él obedeció, pero le rogó que se sentara con él en la butaca, prácticamente Gun quedó en su regazo. Ni en sus peores momentos Off perdía su instinto protector. Con un brazo le rodeó la cintura y con la otra mano sujetaba la enorme taza de café que le buscó Gun.

Off - Ya terminé, ¿ahora podemos dormir?

Gun - Está bien. Pero mañana, tú y yo tenemos un asunto pendiente jumpol, uno que tiene nombre y apellido. Así que descansa bien, que por la mañana tu cabezota querrá estallar a parte de todas las explicaciones que me tienes que dar.

Se fueron a la cama y Off se acomodó muy cerquita de Gun. Inconcientemente, esa vez él no durmió sobre el, sino que se acurrucó a su lado como un ovillo con su cabeza recostada de su vientre.

Off - Te amo, mi pequeño...

Le dijo ya con los ojos cerrados luego de haber besado sin saber por qué su barriga y quedando dormido a los pocos segundos.

Gun - Yo también te amo grandísimo tonto.

Le respondió Gun acariciando con ternura su cabello, quedándose dormido también.

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A la mañana siguiente, como bien lo predijo Gun, Off despertó con un fuerte dolor de cabeza y recordando todo lo sucedido de pronto. Recordó la pelea con Pak, las palabras que él le había dicho sonaban en su mente como un eco y lo angustiaron. "Te aprovechaste de su inocencia y le estás chupando la juventud". "Gun está hastiado de ti".