Drawbbles for you [Hyunho/Minjin]

Lienzo humano

Lee Minho estaba realmente agotado, la respiración era dificultosa, el cabello se le pegaba a la frente debido al sudor. Las condiciones de Hwang Hyunjin no eran distintas, todo su cuerpo estaba completamente empapado en sudor, los músculos del cuerpo se sentían tirantes y le costaba trabajo controlar la respiración. Ambos cuerpos estaban totalmente tumbados sobre la duela del salón de baile y su único testigo era el espejo que sustituía por completo una de las paredes del lugar.

—Creo que no voy a poder caminar los siguientes tres días— sentenció Hyunjin.

—¿Eso qué significa, que soy bueno?— preguntó Minho.

—Eres un desconsiderado, más bien. Aún tenemos un montón de cosas que resolver, pero yo ya estoy agotadísimo.

—No puedes negar que fue bueno y amaste todo.

—Yo nunca lo negué castañito.

Minho sonrió y se movió unos centímetros de donde se encontraba tumbado para besar a su novio. Ambos estaban total y completamente desfallecidos sobre la duela, esto debido a que la coreografía que había montado Lee para el festival de fin de curso era realmente demandante. Aquel ensayo fue suficiente para hacerlos caer al suelo en cuestión de segundos. Hyunjin se incorporó como pudo, alcanzó su botella de agua y tratando de no morir en el intento de beberla.

—¿Quieres ir a comer?— preguntó Minho.

—Preferiría quedarme aquí hasta que mis pulmones se regeneren— respondió sincero.

Minho asintió con la cabeza y propuso ir a comprar la comida. Después de comer tanto Minho como Hyunjin regresaron a sus labores escolares de siempre. Por la tarde ambos estaban total y completamente desfallecidos en la biblioteca mientras intentaban terminar fórmulas para la clase de ciencia.

—Estoy harto— dijo Hyunjin.

—¿Y si vamos a mi casa y allí terminamos?— preguntó Minho.

—Sabes que no haremos eso, en cuanto pongas un pie un tu cuarto caerás dormido a la primera provocación.

—Estoy a punto de hacer eso mismo aquí.

Luego de un rato, sin muchas palabras de por medio, ambos chicos estaban despatarrados sobre la cama de Minho profundamente dormidos sobre los cuadernos y plumones.

El primero en despertar fue el dueño de la habitación, quien se dedicó a admirar por unos momentos a Hyunjin con la boca semiabierta y lleno de calma. Cualquiera se hubiese quedado allí simplemente admirandolo, pero Minho no era cualquiera, asi que un par de minutos después Hyunjin tenía bigotes dibujados en el rostro además de un tierno rubor. Minho no se conformó con ello, así que continuó rayando la piel del más rubio, hasta que al final el día simplemente era un trazo completo que terminaba en la leyenda "propiedad de Lee Minho" seguido de un autorretrato en el abdomen del chico.

Muchas horas después, cuando Hyunjin entró al baño, una lluvia de golpes fue lo que Minho recibió por parte del rubio enfadado, quien negaría en voz alta si alguien le preguntaba sobre el cosquilleo en sus estomago después de haber leído aquella sentencia.