Maneras De Confesarte || KENHINA || COMPLETADA

Tercera Manera: ¿Una canción?

La idea principalmente había venido de una escena muy cutre en el nuevo videojuego que había adquirido la semana pasada, Kenma había decidido distraerse de sus tontos sentimientos y de Shouyo—de nuevo —, o al menos eso fue lo que  intentó tratando de responder al pelirrojo dos minutos después de cada mensaje que enviaba. Aún así, todo pareció volver a la misma rutina que estaban acostumbrados y se sentía menos agobiado.

No duró mucho.

Shouyo era una persona que contaba cada detalle de sus días y Kenma le encantaba escuchar y leer cada uno de sus pensamientos y momentos del día que hacía revolotear al pelirrojo. Hasta que Shouyo le había dicho que Tanaka había confesado sus sentimientos a la ex manager del equipo de Karasuno, aparentemente Tanaka había pedido ayuda de todos los de segundo y tercero, algo grande con rosas y una confesión honesta con una canción muy cursi frente a todos en algún parque de Miyagi.

Kenma en silencio admiró el valor de Tanaka al hacerlo frente a muchas personas, algo que claramente el teñido no podría hacer sin desmayarse de absolutos nervios. Sin embargo, el hecho de que esa confesión haya sido exitosa motivó un poco a Kenma, a pesar de escuchar a su cerebro susurrarle que Tanaka tenía la ventaja al estar confesandose a una chica y no a alguien de su mismo sexo. Trató de ignorar tanto como pudo pensamientos acerca de las peores reacciones que podría traer su confesión a Shouyo porque creía saber que Shouyo no lo juzgaría.

Quizás.

Regresando a la razón por la que ahora está buscando en su playlist de Spotify su mejor repertorio de canciones románticas se debe a que en el videojuego que compró había una escena en la que tenía que tomar la decisión de cantar en el karaoke para impresionar al protagonista o quedarse sentada mientras miraba como Rumiko (personaje del juego) se acercaba a Takano (el protagonista). Kenma no quería que Takano se quedara con Rumiko, así que hizo cantar a su personaje, pero sucedió que su personaje solamente cantó desde el minuto dos de la canción en la cual cantaba melosamente y miraba a Takano, por supuesto eso le dio una grandiosa idea.

Le dedicaría a Shouyo una canción y le enviaría el minuto exacto por mensaje y de esta manera él podría enterarse que Kenma ha gustado de él desde hace mucho tiempo.

La cosa es que no todo estaba saliendo como planeaba.

Su playlist realmente no tenía algún toque demasiado romántico o algo que expresará como se siente con el pelirrojo, habían pasado alrededor de 30 minutos cuando decidió fisgonear en la playlist pública que tenía Kuroo y arrugó su nariz cuando encontró muchas canciones de desamor recientemente agregadas, Kenma prefirió buscar en playlist públicas.

Después de básicamente una hora más tarde de escuchar canciones completas finalmente encontró una que no implicaba "hacer el amor" y menos explosivas sobre los sentimientos románticos.

Dandelions — Ruth B.

Kenma estaba sorprendido al escucharla y comenzó a pensar en sus muchos momentos con Shouyo y lo mucho que lo hizo sentir como esta canción. Sentado en el borde de su cama y con los ojos cerrados se imaginó el futuro imaginario en el que Shouyo le diría que también gusta de él y las probables citas que tendrían, las llamadas largas estarían llenas de sentimientos que no tendría que esconder más, podrían tomarse de las manos cuando estén en privado y arriesgarse sosteniendo sus meñiques juntos cuando se despidieran en la estación de tren después de una visita en su casa o en la casa de Shouyo. Algún día podría llamar a Shouyo suyo y él le pertenecería a Shouyo.

Kenma abre sus ojos llevando su mano a su boca como si hubiese dicho todos sus pensamientos en voz alta, sonrojándose hasta la punta de sus orejas. Nunca habría pensado que sería un soñador cursi como Kuroo.