4

100 11 0
                                    

En verdad pareciera que estoy dedicándome 24/7 a detestar el romance y las relaciones, pero la verdad es que estos pensamientos surgen cuando algo los empuja a estallar.

Estoy comenzando a sentir miedo a no poder aguantar a Felix mucho más. Jeongin entiende perfectamente la raya que no se cruza al hablar de la otra persona, por otro lado Lixie parece hasta llegar a preocuparme, como si hubiera generado una dependencia a Chan. Comprendo que le guste, pero no encuentro correcto que sea el único tema de conversación que tengamos, también me gustaría saber que hizo el fin de semana (aunque no sería mucha variedad, apostaría mi peluche de golden retriever a que habló con Chris por instagram), o si cocinó algo rico.

Bueno, no me gustaría hacerlo sentir mal así que no digo nada, más material para mi mente que tanto odia este mundillo del amor.

La materia de historia también era detestable, honestamente no me importa mucho a este punto la evolución del hombre, pero debía tener algo que estudiar para las próximas pruebas, así que lo anotaba de todas maneras.

La escuela se encontraba muy silenciosa ya que se habían ido todos a sus casas, sólo quedaba yo en mi aula, anotando con toda la paciencia del mundo la materia y aprovechando de repasar algo de ella. No habían niños corriendo ni parejas fastidiando, bastante cómodo.

Fue en ese momento en que un ser irrumpió mi paz. Llegó un chico que parecía tener similar edad a mí, apoyándose en el marco de la puerta y mirándome.

—Hey, lamento interrumpirte pero me gustaría saber si tienes algún lapiz que me prestes, tengo que dar un examen atrasado.

Saqué un lapiz de mi estuche y estiré mi mano, sin voltear a mirarlo. Mire de reojo su cuerpo moviéndose hacia mí, tomó el lápiz y vi una sonrisa en sus labios.

—Muchas gracias, no sabes cuánto te lo agradezco.— Su voz se notaba con más vida que antes, cuando llegó parecía casi un robot molesto.—¿Vas a estar más tarde? Para devolvértelo, aunque lo dudo, me demoro mucho haciendo exámenes, ¿sabes-

—Está bien, vas a llegar tarde.— Dije a la par que subrayaba algunos conceptos.— Ven a devolvérmelo mañana si quieres.

—Oh, okey, ¿Esta es tu sala?—Asentí desinteresado, me causaba gracia lo rápido que hablaba, aunque además de hablar rápido su voz sonaba como si estuviera cantando continuamente, su voz era melódica si se podría decir así.—¿Cómo te llamas?

dirigí mi cabeza y mirada por primera vez hacia él para responderle.—Kim Seungmin.— Sus ojos eran grandes y su nariz respingada, sus labios tenían una forma peculiar que me pareció jamás haber visto antes.

—Genial, Gracias seungmin, yo me llamo Minho, ¡Nos vemos mañana!— Y así se fue de mi vista.

Si bien quedé un tanto desconcertado, no le di muchas vueltas a lo ocurrido y volví a mi cuaderno, quejándome por la gran cantidad de materia que me faltaba.

Anti-cursilería ₊˚✧ seungknowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora