ROMPIENDO LOS ESTEREOTIPOS

XXII

Había pasado más de una semana, Suni no había regresado a casa. El señor Seo y Changbin estaban preocupados porque no sabían de su paradero.

La última vez que la vieron fue cuando salió corriendo de la casa después de haber discutido con su madre por su nueva aparición después de muchos años.

El señor Seo no había dejado de buscar a su hija por mar y tierra por alguna extraña razón la señora Laila se ofreció como voluntaria para poder encontrar a su hija después de ocasionar el daño.

Changbin había recibido la llamada de uno de sus grandes amigos diciendo que su hermana se había parecido en casa del pecoso gritando y ocasionando una pelea qué terminó mal. Tanto su hermana cómo el pecoso estaban siendo trasladados al hospital por severos daños físicos.

La familia tomó la camioneta de inmediato y se dirigió a la casa del pecoso, al llegar encontraron patrullas y dos ambulancias fuera esperando por los heridos. El señor Seo sintió que su corazón era arrancado de su pecho al ver pasar a su hija sobre una camilla con una gran gasa rodeando su costilla derecha debido a que de la misma salía mucha sangre, además, tenía una mordedura impregnada en el cuello.

Por otro lado Changbin se sintió mortificado al ver pasar al pecoso sobre otra camilla con moretones en el rostro arañadas en las costillas raspaduras en las rodillas y lo que parecía ser una contusión severa en la cabeza.

Laila se fue directamente al hospital con la ambulancia mientras que Seo Changbin iba en la camioneta detrás de la ambulancia a toda velocidad.

Al llegar la chica fue metida a cirugía con urgencia debido a que una de las heridas había sido muy profundas y había roto muchas capas de piel en su costilla derecha en la cual salía demasiada sangre y estaba provocando una hemorragia que podría acabar con su vida.

Félix había sido sedado en otra habitación ya que sus heridas no eran más graves, sus madres estaban con él y Changbin también quería estar con él pero tenía miedo de ser rechazado o que su novio estuviera cerca.

Changbin se sentó con su madre, la cual le tomó la mano en muestra de apoyo. Changbin se había sobresaltado al sentir el contacto físico de aquella mujer después de muchos años, ya que las únicas veces que ella lo tocaba era para golpearlo y humillarlos cuando su papá no estaba.

-Estoy contigo no te volveré a dejar- Laila beso la cabeza de su hijo antes de decir las siguientes palabras. -pero tienes que aceptar que tú tienes un poco de culpa en lo que acaba de ocurrir con tu hermana-

Changbin se dio la vuelta sorprendida al escuchar lo que su madre estaba diciendo. Como cualquier otra madre ella debería estar llorando y no teniendo una cara de malicia ante lo que estaba ocurriendo.

-¿Qué quieres decir madre?- Changbin se limpió las lágrimas. -Yo no tengo la culpa de que mi hermana haya ido a casa de Félix para golpearlo, recuerda que ella había desaparecido desde que tú llegaste-

-Yo sé porque fue a casa de ese muchacho.- La mujer aparto la mano de Changbin y lo miro con los ojos avellana oscuros que tenían. -Tu hermana me dijo que ese muchacho quería revelar tu verdadera identidad y si ella no lograba callarlo tú ibas a ser el perjudicado. Tu hermana Suni solo trato de defenderte ya que tú no quieres decir quién eres en realidad. El culpable de que ella esté postrada en esa cama eres tu cariño-

Un doctor de aspecto mayor se acercó a los padres de familia. -Imagino que ustedes son familiares de la chica que acaba de llegar; acaba de salir de cirugía y todo salió muy bien. El único detalle es que tendrá una gran cicatriz en la costilla pero con algunas cremas podrá desvanecerse en un cuestión de tiempo- El doctor estaba orgulloso e hizo una reverencia ante los mayores. -Ella está dormida en la habitación 13 pueden pasar a visitarlas sin despertarla, la anestesia se pasará en unas 3 horas. Compermiso-