Lost soul

CAPITULO 6

Mire al chico sin camiseta directamente a sus ojos.

- No se quién eres, pero será mejor que salgas ya de mi habitación. - le amenacé.

- Nisha, soy yo, Kenneth - me dijo levantando las manos.

-¿ Kenneth ?- lo escanee mejor, su abdomen bien definido dejaba a la vista más tatuajes, no dejaba ver nada de ese pelaje negro. Su rostro cuadrado y simétrico no dejaba ver ningún hocico. Desconfíe.

-Si, mira - me dijo al ver mi rostro señalando el vendaje que le hice.

Era cierto.

- Pero, ¿Cómo? Eras un lobo - la cabeza me emoezaba a dar vueltas.

- Si, eso - dijo rascándose la cabeza - Puedo cambiar mi forma a la de un lobo- dijo sonriendome.

- ¿Eres un hombre lobo? - abrí los ojos.

- Algo así - decía.

Esto era muy extraño, no era que no pensara en que hubiesen mas especies pero igualmente era algo sorprenderte.

Escuché como unos pasos se acercaron a mi puerta giré rápidamente mi cabeza, era mi hermana viniendo hacia acá.

- Debes esconderte, ya -

Le dije acortando la distancia, para cogerle del brazo, cuando hice eso, sentí una corriente pasar por todo mi cuerpo, aleje rápidamente la mano viéndolo fijamente, al parecer el también lo sintió.

- Metete allí - señale debajo de mi cama - y no hagas ruido.

Hizo lo que dije, no tenía esperanzas de que este individuo de casi 1'90 cupiese allí, pero menos mal que la cama era grande.

No sabía ni porque lo escondía, debería mandarlo a la mierda, pero algo en él me llamaba la atención, y mi instinto me decía que no era peligroso.

Tocaron la puerta y se abrió, puse mi cara neutra, haciendo que estaba mirando algo en mi escritorio.

- Sky- decía mi hermana-

- Dime, Melody- respondí fría estaba enfadada con ella no iba a negarlo, solo quise ayudarla y me lo agradeció gritandome y ella sabía que odiaba que alguien lo hiciera.

- Lo siento, actúe como una Imbécil- dijo aún en la entrada- solo querias ayudarme.

Se le veía arrepentida.

- Si, lo hiciste - respondí sin verla aún.

- Perdón, de verdad que lo siento solo quería intentar defenderme yo misma, pero tú sabes que odio la violencia, se reunieron todos allí riéndose de mi, y me enfade conmigo misma por no ser lo suficientemente valiente como tú y eche todo ese enfado en ti - dijo con lágrimas en los ojos.

Me acerqué a ella y le limpie las lágrimas. No era muy fan del contacto físico, no me gustaba, pero con ellos hacia la excepción.

- Melody, tu eres muy valiente, incluso mas que yo, no quisiste recurrir a la violencia porque eres un buena persona, las únicas cobardes son esas imbéciles, que me arrepentí de no haberle dejado el otro ojo morado - dije acariciándole la mejilla, esta sonrió al escuchar lo último.

- Gracias, Sky, por defenderme y por todo- me abrazó, me tense, pero luego me relaje y se lo devolví. Luego se despidió para ir a dormir.

Casi me olvidó de que estaba aquel chico debajo de mi cama, me agaché y le dije que ya podía salir.

No tenia ningún colchón extra o algo para que durmiese en el piso, pensé en mándarlo a freír espárragos al suelo, pero estaba intentando ser mas empatica, que remedio.

Si seguro será por eso.

Cállate.

- Puedes dormir conmigo en la cama - dije suspirando.

- No, no hace falta el suelo está bien - respondió.

- No hagas que me enfade, y ve a la cama - dicho así sonaba mal, lo reconozco, pero no pensé en ello.

Me miro fijamente, le sostuve la mirada.

Me hizo caso y se tumbó en un lado de la cama, mirándome fijamente. Suspiré y me di la vuelta para ir a mi armario y coger otra colcha más, pensando si hacía bien dejar a un desconocido en mi casa, y para colmo dormir en mi cama.

Al cogerla y darme la vuelta, lo vi sentado en la cama mirándome pero está vez con los ojos como platos, dandole un escáner a mi cuerpo.

MIERDA.

Tenía puesto mi pijama que dejaba ver la gran parte de mi espalda, brazos y piernas, y con ella todas mis cicatrices.

- ¿Quién te hizo eso? - dijo levantándose, acercándose a mí enfadado.

Sí, enfadado, como si le importase.

- Nadie, vuelve a la cama, tu pierna no está curada -

- Primero dime quién lo hizo-

- No, ahora ve a dormir- fruncí mi ceño.

Mierda, porque me ponía nerviosa sus miradas, ni las del superior me dejaban así.

Volvió silencioso a la cama.

Le di la colcha, y me tumbe en la otra punta de la cama. Pero aún sentía su calor y su aroma a lavanda y bosque

-¿Quienes eran los dos individuos del bosque?- pregunté de espaldas a él.

- Si te respondo, me dirás quién te hizo esas cicatrices-

- ¿Estás negociando información? -

- Hablo en serio- dijo serio.

- No lo puedo decir -

Este suspiró.

- Eran vampiros -

Confirmo mis sospechas.

-¿Y porque querían pelear con nosotros?

- Conmigo- me corrigió este- odian a los de mi especie, y tendrias que haberme echo caso cuando te dije que te vayas- dijo molesto.

- No te iba a dejar allí - le respondí.

- ¿Porque? Era un desconocido, un lobo.

Ahora que lo pensaba, tenía razón, perfectamente me podría haber ido.

- No lo se- dije sincera - solo no te iba a dejar solo.

Nos quedamos callados un buen rato

- Tu estás en peligro - hablo- estaban muy interesados en ti, y cuando les mostraste que no eras una humana no te dejarán tranquila, volveran a por ti

Perfecto, ahora también tenía que lidiar con vampiros.

- Me las apañaré - suspiré.

- No podrás tú sola con ellos- dijo.

- Siempre he podido sola, esto no cambia nada- hasta yo note la frialdad con la que hable.

- Puede que ahora eso cambie- esta vez su voz sonó más cerca.

Al girarme vi que estaba viéndome, ni siquiera escuché cuando se movió.

- Buenas noches- dije dandome la vuelta sabiendo que él me miraba la espalda.

- Buenas noches, Sky -