🥀 Prólogo 🥀

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†  P̷R̷Ó̷L̷O̷G̷O̷  †

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Yo

En la casa de Acuario...

—Muy bien, Hyoga —habló el caballero de Acuario —, lograste usar la ejecución de Aurora. Te has llevado todo de mí.

La casa de Acuario estaba totalmente congelada, la temperatura lograba llegar al -0. Ambos estaban en las últimas, sus cuerpos ya no soportaban en cero absoluto del frío.

—Pudiste adquirir el cero obsoluto mientras podías sentir algo. Lograste algo más allá que yo nunca pude, por fin despertaste el septimo sentido.

Con aquellas palabras el caballero de Acuario cae al suelo. Fue en ese momento en donde recordó a alguien; a una mujer. Con el último aliento del caballero de Acuario; él logró enviarle un mensaje al caballero dorado de escorpión, quien ya se encontraba en su casa del zodiaco.

Milo logró sentir el gélido viento desde la casa de Acuario, logrando llamar su atención.

—¿Qué es...? —Milo logró entender el mensaje de Acuario —Entiendo. Iré a Siberia. Veo que ya lo tenías planeado —él bajó la mirada —, Camus...

Días después...

Al otro lado del mundo; Siberia. En dicho lugar ya se encontraba una mujer cargando carbón junto a otra, pero lo más llamativo era el color carmín que danzaba con la nieve. La castaña que iba adelante de la pelirroja se detuvo, para poder esperar a su amiga.

—¡Apresurate T/N! —Le gritó —Debemos llegar.

—No te quejes, hago lo mejor que puedo.

Ella infla sus mejillas.

—Últimamente has estado de mal humor.

—Claro que no... Solo... —Ella meneo la cabeza —¡Sigamos!

Mientras ella seguía, T/N lograba ver una preciosa aurora. De pronto la imágen de un jóven llegó a ella; lo cual le causó una sensación de melancolía y tristeza. Lo cual es un tema bastante sensible para ella; el recordar a su viejo amigo desde la infancia.

—Camus... —Masculló.

—¿Qué ocurre? —le pregunta la castaña.

Ella ladea la cabeza y sonríe.

—No es nada, sigamos.

«¿Por qué tengo un mal presentimiento? Él debe de estar bien... »

Ambas seguían caminado, hasta que a unos cuantos metros ellas lograron ver una armadura reluciente de oro, llamando por completo su atención. T/N se sorprendió al ver al jóven caballero dorado.

—¿Un caballero de oro?

Milo se acercó lentamente, y su vista recayó en la jóven pelirroja. Él no sabía que palabras utilizar, por lo cual, simplemente dió un suspiro.

—Tú eres T/N, ¿no?

—Ehh, sí, ¿y quién es usted?

—Soy Milo de escorpión. —Se presentó —He venido desde Grecia para poder darte las últimas palabras del caballero dorado: Camus de Acuario. Quién murió en la batalla de las doce casas.

La pelirroja suelta la canasta de carbón, dejandolo caer entre la nieve. Ella cae de rodillas y su mirada reacae en el suelo, no tardaron sus ojos en nublarse de lágrimas, ella se negaba a la verdad, que aquel había muerto.

—Es mentira...

—Él me pidió que personalmente te dé esta carta —Milo extiende el sobre hacia ella, y ella lo recibe —. Allí se encuentran las últimas palabras de Camus.

—Dime algo, su muerte no será en vano ¿verdad?

Milo ve a la jóven con lágrimas en los ojos; él no sabía como explicarle la situación; Camus había muerto con el fin de que su alumno logre llegar al séptimo sentido.

—Es complicado. Lo único que se, es qué fué su alumno quien acabo con su vida.

—¿Su alumno?

—Hyoga.

Esto último hizo que ella estallara en llanto, mientras la castaña se acercó a ella para poder consolarla.

—Con su permiso.

Y así, el caballero de escorpión se retira...

Nota de autora:

Holaaa❤

Ha pasado tanto tiempo desde que escribí esta historia, fue desde el Julio pasado. Como pasa tan rápido el tiempo jajajaja.

Datos de la historia:

Narrada en: primera persona y en tercera persona.

Mi bella rosa de hielo ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora