M. M. A

Capítulo 74

Lyla miró la Casa Violet.

La casa grande de dos pisos era mejor que cualquier otra casa en Elwood.  Aunque la escala era pequeña, la perfección y la belleza de la mansión en sí era comparable a la del vizconde Lansfield.

Era una casa tan bonita que cualquiera que no supiera pensaría que era la villa de un noble.

“El dinero que ahorramos lo gastamos en buscar a nuestra hija perdida y huir de las fuerzas desconocidas que nos perseguían".

"Mamá…  …  .”

“¿No es eso una cosa del pasado?  Ya lo olvidé todo, así que no tienes que estar desconsolada ahora.  Espero no lo hagas".

Sophia colocó el cabello de Lyla detrás de su oreja para consolarla.

“Alguien vino a visitarnos hace tres años.  fuimos los primeros en verlo.  Desde el carruaje en el que viajaban hasta la ropa que vestía y las personas que lo acompañaban.  No sabía quién era, pero supe de inmediato que era una gran persona”.

Lyla se sobresaltó.  Cuando se trata de nobles que visitarían a sus familias, el Conde Larestine fue lo primero que se le ocurrió.

“¿Quién era ese, quién era ese?  ¿Qué, después de todo?"

Preguntó Lyla con una voz mezclada de miedo e ira.

¿Y si el Conde Larestine le hiciera algo malo a su familia?  Aunque ya estaba muerto, todavía quería vengarse de alguna manera.

¿Vio la miseria en el rostro de Lyla?

Sophia envolvió suavemente su mano áspera sobre la cara de Lyla.

“Vamos, Lyla, mírame.  ¿Cómo estoy ahora?”

Preguntó Sophia con una cálida sonrisa.

“Si la persona que vino a nosotros ese día provocará que tuviera problemas de corazón, no sería capaz de vivir feliz para siempre”.

Lyla suspiró aliviada.  Aunque ya había pasado, fue una historia desgarradora para Lyla.

Sophia sonrió.

“El hombre fue muy amable con nosotros.  E hizo todo lo que pudo para ayudarnos a escapar y establecernos aquí.  Él también construyó esta casa”.

Los ojos de Lyla se agrandaron.

"¿De verdad?"

"Así es.  De lo contrario, no podríamos alquilar una casa como esta”.

Ante la risa de Sophia, Lyla suspiró un poco.

'No sabía que había tal cosa'.

Por supuesto, Lyla se sorprendió al ver la Casa Violet por primera vez.  La casa donde vivía con su familia cuando era joven era mucho más pequeña y destartalada que esta.

Pero no pensó profundamente en ello.  Solo pensó que su familia tuvo la suerte de conseguir una casa.

Considerándolo profundamente, fue porque Lyla aún no tenía el coraje de enfrentar el pasado.

'Eso fue lo que paso...  …  .'

El hecho de que se enteró más tarde le dio una sensación extraña.  Lyla sintió curiosidad por el benefactor de su familia, cuyo rostro y nombre desconocía.  Quería devolver la bondad al haber ayudado a su familia.

"Eso no es todo en lo que ayudó.  El huerto en el que trabajamos ahora le pertenece.  Al principio nos iban a entregar toda la huerta, pero dijimos que sería una carga demasiado pesada, así que ahora estamos alquilando a bajo precio.  De hecho, es como regalarlo gratis”.