Capítulo 8

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Bajé corriendo a ver a mi madre y al notar la expresión de su rostro, se veía un poco enojada.

--Te he dicho miles de veces que cuando yo te llamo, tienes que venir enseguida.

--Lo sé madre y lo siento... Es que estaba ocupada.

--¿Un chico puede ser más importante que yo? Vas a hacer que le comience a tener cólera al pobre de Jack sin siquiera conocerlo. Ariana, por favor.

--Mamá, ya no tengo cinco años. Si me demoro en bajar o no, es mi problema. No me puedes controlar como a una niña, entiéndelo. A demás te dije que estaba hablando con Ana-dije algo exasperada.

--Nadie quita que seas mayor, pero no por eso vas a hacer lo que te da la gana.

--¿Por no bajar? ¡Mamá por Dios! Estas exagerando.

Me miró fijamente y me quedé callada. Cada vez que discutimos ella jamás puede perder... ¿Por qué será así?

--¿Estás viendo bien mis ojos no Ariana Daniela?

Oh no... Me dijo los dos nombres.

--Sí mamá...-dije bajando la cabeza. Mejor no le discuto- Ya me voy.

--No te he dicho que te vayas, hija. No quiero pelear contigo, solo quiero conversar...

¡PERO QUÉ BIPOLAR ES MI MADRE!

--Ya, ¿de qué quieres hablar?

--Sobre Jack...-sonrió.

--Mamá, ya te dije que no hay nada que hablar sobre él. Es un simple amigo de la universidad, que quiere algo conmigo pero yo no. No me gusta, ni me interesa. ¿QUE MAS QUIERES SABER?

--¿Por qué no te gusta? Se ve buen chico...

--Pues... No sé. No hemos tratado mucho la verdad.

--¿Y te dejaste besar por alguien que no conoces tanto?-preguntó asombrada.

--Fue de un momento a otro, sabes que jamás dejaría que algo así pase. Pero no tuve tiempo de reaccionar...

--Bueno... ¿Que tal vas en la universidad?

--Bien, ahí. Como sabrás no siempre es fácil... A veces se reprueba, pero ahí voy.

--¿¿¿Qué, cómo, qué???

--Jajajaja, es una broma madre, voy bien. Sabes que siempre es así.

--Es cierto, por eso estoy orgullosa de ti y te amo mucho.

--Y yo a ti-sonreí- ¿Qué tal estuvo la semana en el trabajo para ti? ¿Que tal los casos?

--¡Bueno! Me han pasado muchas cosas esta semana-respondió y concluí que esto sería el comienzo de una larga charla...

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--Gracias mami, ha estado delicioso-dije mientras levantaba nuestros platos de la mesa- Y el helado de chocolate fue el mejor postre para hoy, tuviste una muy buena idea-sonreí.

--Déjalos sobre el lavadero que yo los lavaré, mi amor.

--No te preocupes mamá, los lavaré yo, tú ya cocinaste.

--Gracias Ari... Por cierto, hoy vendrá Álvaro, espero que no te incomode.

¡Ah! Con razón que me ha tratado tan bien hoy... Quiere que ponga mi mejor cara para cuando venga su novio. ¡Ay estas madres!

--Sabes que él me agrada, mamá. No hay problema alguno.

--Gracias hija, iré a ver que ropa me pondré. Vamos a ir al cine, ¿quieres venir con nosotros?

Por Un TravesuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora