O7. PARK GRASS SECRETS

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Los días habían transcurrido con normalidad, sólo que ahora Millie pasaba un poco más de tiempo con Sadie y sus amigos, no entablaba una conversación realmente completa con los demás, se resumía a sentarse con ellos en las gradas (una vez cada cuatro días o algo así) y escuchar como hablaban de los demás en la escuela, casi siempre eran cosas negativas.

Millie había hecho la observación de que Sadie parecía sólo ignorar todo, podía verla hacer gestos cuando algo no le parecía, algo que los demás parecían no notar.

Entonces Millie pensó que Sadie sólo quería encajar con ellos de cualquier forma, porque no era igual que sus amigos, aún no la había escuchado decir algo igual de malo sobre alguien como Lily y Brad solían expresarse, en cuanto a Iris, su compañía se resumía en poner música o leer algo acompañándolos.

Millie y Sadie terminaron la tarea de geometría hacía unos días, obtuvieron una perfecto calificación, la castaña aún no entendía porque Sadie seguía relacionándose con ella fuera de lo académico. No le molestaba, de hecho le alegraba y se hacía a la idea de que había comenzado a agradarle a Sadie.

—¿Vieron a Sarah Turner hoy?

—Claro que lo hice, es cómo si quisiera copiar mi estilo y el de Sadie —dijo Lily.

La pelirroja subió la mirada al instante, ya que se encontraba mirando las puntas de su cabello sin mucho interés, frunció el ceño en forma burlesca, Millie subió la mirada también.

—Es algo tonto, no somos la únicas que usan ese tipo de ropa, es como si estuviera acusándote a ti de copiarme porque estás bebiendo el mismo jugo de naranja que bebo todos los días —Iris abrió sus ojos en par al escuchar el tono, como si fuera una broma, pero al mismo tiempo con un significado serio —Es demasiado ridículo.

—¿Qué tipo de ropa? —preguntó Iris, adentrándose a la conversación.

Millie sólo observaba callada.

—Medias con esos estúpidos Dr. Martens negros.

Iris sólo se soltó riendo, mirando a Lily fijamente.

—No entiendo lo gracioso.

—Lo gracioso es que están diciendo que eres una estúpida que se cree la persona más única y el centro de la escuela sólo por vestir así, Lily, ¿has entrado a Tumblr en estos días? Literalmente es la moda de hoy, sólo que estamos en un estúpido pueblo donde nadie se atreve a hacer cosas nuevas —Y Brad no pudo estar más en lo correcto.

Millie contuvo una risa. Sadie le apretó la pierna a Millie disimuladamente, mientras que Iris no contuvo una ruidosa carcajada, Brad rió también, pero no con la misma intensidad con la que la rubia lo hizo. Lily simplemente puso sus ojos en blanco mientras una sonrisa burlesca adornaba su boca.

—Millie, también deberías vestirte así —Millie levantó su mirada con sus ojos puestos en Sadie, la castaña frunció el ceño y asintió, pensando que hablaba en serio, pero de alguna forma era sólo para burlarse de Lily —Pienso que te quedaría muy lindo —eso último era muy en serio, Millie asintió de nuevo, con un brillo en sus ojos al tomar eso como un halago que Sadie pudo notar. Y luchó con todas sus fuerzas no sonrojarse, y lo logró.

Brad, Iris y Lily siguieron con otro tema, Sadie no pudo descifrar si Lily se había molestado, pero unos minutos después, Sadie se aburrió de estar ahí.

—Bueno, Millie y yo tenemos que ver algo de filosofía, nos vemos después —Sadie tiró del brazo de Millie mientras se levantaban de las gradas, la castaña le siguió el paso con confusión, no tenían ninguna duda en filosofía.

Cuando estuvieron lejos de los amigos de Sadie, Millie rompió el silencio.

—¿Dudas en filosofía? —Sadie asintió y rió por lo bajo.

—Quiero a mis amigos, pero me harté de escucharlos —Millie relamió sus labios, ella también se había hartado, y agradecía que ya no estuviesen ahí.

—Pienso que eres algo diferente a ellos.

—¿Si? No mucho en realidad... 

—Ellos son algo groseros sin motivo, creo que nunca te he visto ser grosera sin ningún motivo de por medio —hablaba de las veces en las que ella había provocado algunas malas actitudes a Sadie.

—Bueno, si tu lo dices.

Millie asintió.

—Hay un parque a dos calles, ¿quisieras acompañarme? Volveremos antes de que la siguiente clase comience, lo prometo —puso la palma de su mano en alto.

—En ese caso, si.

Sadie le sonrió y Millie sintió que sus piernas flaquearon. Caminaron hasta aquel parque, en menos de diez minutos habían llegado, Millie comparó el lugar con un pueblo fantasma, ya que, estaba desierto, no pasaba ningún auto.

Sadie se recostó en el pasto, Millie hizo lo mismo, pensando en que partes del pasto seco y tierra se le quedarían pegados a su suéter, la pelirroja sacó sus audífonos y los conectó a su teléfono, pasándole uno de los audífonos a Millie para escuchar música juntas.

Sadie había descubierto en los últimos días a Millie tarareando una canción de Lana Del Rey, entonces lo recordó y puso Born to Die.

Millie tamborileaba la melodía con su mano en su pecho y sus ojos estaban cerrados, Sadie se dedicó a observar con detalle cada facción de su rostro, por un pequeño momento deseó recargar su mejilla con la de Millie, le pareció que era tan suave. Y pensó que era muy hermosa mientras relamía sus labios. Después negó con los ojos abiertos pensando en la diferencia de edad que tenían, Millie con quince años y ella a nada de cumplir los diecinueve.

Comenzaron una conversación por Sadie, quien le preguntó como se encontraba la familia de Millie, y eso desencadenó una larga plática de las antiguas creencias y Sadie riendo un poquito demasiado de todo lo que Millie le contaba.

—Entonces. Si fueras gay...

—Creo que realmente mis padres me echarían de mi casa o terminarían golpeándome tratando de hacerme entrar en razón si yo, bueno... Si yo, ya sabes...

—¿Gustaras de una chica? —asintió, Sadie formó una mueca —Eso es una mierda, ¿no?

—Si, eso realmente apesta.

—Bueno, tu punto a favor es que no te gusta ninguna. ¿No?

¿No? Literalmente Sadie estaba con la cabeza recostada en su hombro y sus mechones rojizos casi adentrándose a su nariz con cada respiración, estaban muy cerca y eso podría volar el corazón de Millie cuando recordara la cercanía horas después.

—Creo que anteriormente me he sentido atraída a personas de mi mismo sexo, pero, nunca nada en serio, no podría adivinar si sólo las hormonas están alocadas y hablando por mí, o es una forma en la que mi cerebro quiere que desobedezca a mis padres, no tengo idea —se atrevió a decir, ya que, sintió la confianza suficiente para decir eso —Supongo que tengo cosas que agradecerle a la vida, ya que nada ha llegado tan lejos.

—Bueno. Yo soy lesbiana, y creo que eres la primera a la que se lo cuento —soltó una pequeña risa.

Millie no pudo sentirse más especial. Su corazón latía y latía.

—¿La primera? —la pelirroja asintió —¿A qué se debe? ¿Tus amigos te juzgarían o algo parecido? ¿Tus padres?

Sadie decidió omitir lo de sus padres, no estaban en ese nivel de confianza aún.

—No siento la necesidad de aclararles ese tipo de cosas, no sé... —No mentía, no pensaba en el rechazo, ni en la confianza, simplemente era algo insignificante, claro que podría decírselos, pero sólo cuando se diera alguna situación y no le daría muchas vueltas.

—¿Has salido con chicos anteriormente?

—Si, unos cuatro o cinco, pero nunca nada serio. Es lindo sentirte querida, creo que es más sobre eso, supongo.

Y Millie estaría dispuesta a hacer todo para que ella se sintiera la persona más querida de todo el planeta tierra.



volví.

con amor,

—yo<3.

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