Narrador Omnisciente
El equipo ya se encontraba en el ascensor, estaban conmocionados por lo que acababa de pasar y Hyung-min estaba preocupada por su pareja, al tomar sus manos luego del juego pudo escuchar algunas quejas de su parte, como si la hubiera lastimado, por lo que una vez dentro del ascensor observó con detenimiento sus manos, las quemaduras y ampollas cubrían gran parte de la zona. Era consciente de que las suyas estaban igual o peor pero desde su punto de vista eso no era importante, desde hacía mucho tiempo dejó de preocuparse por sí misma y si no había muerto aun era por dos sencillas razones, primero, se lo había prometido a ella, se lo prometió a Eun-ji y segundo, porque no quería que su muerte fuera en vano, ahora debía preocuparse por Sae y si para ello debía dar su vida no dudaría en hacerlo, después de todo, siempre a sido así, una vida por una vida.
- Por la luna, ya cállate - susurro la castaña mientras se tapaba la cara, uno de los hombres, más específicamente el jugador 244, le había parecido un buen momento para empezar a rezar y sus murmullos comenzaban a molestar a la de ojos color miel.
- Oye... - llamó la nueva - ¿A quien le estas rezando? ¿A Dios? - preguntó con un deje de burla - ¿De verdad crees que estás vivo gracias a dios? - volvió a preguntar esta vez ganando la atención de la Park, una leve risa escapó de su boca para después inclinar su cuerpo hacia delante y tomar sus rodillas con sus manos, haciendo la función de soporte - si sigues respirando y moviendo esa boca es gracias a ese anciano - dijo mirando al mayor - y a esa chica, que se le ocurrió una estrategia a último minuto - al voltear alzó su puño en dirección a la pálida quien simplemente correspondió su saludo acompañado de una sonrisa victoriosa, no hacía falta decir que Sae-byeok no estaba contenta con ello - entonces si vas a dar gracias, agradecerles a ellos por salvar tu miserable vida - el hombre por fin dejó de hablar levantando la mirada algo molesto en dirección a la menor.
- Pobre oveja perdida ¿No escuchas los gritos de los que fueron clavados en la cruz hoy? - preguntó algo molesto - por su sacrificio y sangre es que estamos vivos - sus palabras comenzaban a ser molestas - en nombre de todos nosotros, pecadores, di gracias por su sacrificio, por la elección hecha por el de arriba y dije una oración - la adolescente lo miro con total desinterés.
- No es cierto - interrumpió - Tú los mataste - el hombre al escucharla comenzó de nuevo con sus rezos cosa que ya comenzaba a molestar a sus compañeros - Ah ¿entonces Iremos a cielo si rezamos, verdad? - pregunto - Maldición entonces voy a empezar - cerró sus ojos a la vez que juntaba sus manos, Hyung-min al ver esto no dudó en seguir su juego así que copió su acción, soltando la mano de Sae para ponerse en posición de rezo.
- Te agradezco padre celestial - empezó la castaña con los ojos cerrados - hoy trabajamos como un equipo para enviar a gente a tu lado, matandola - abrió su ojo derecho para ver a la chica a su lado, haciendo un ademán para que ella continuara.
- Por favor ayúdanos a enviar a más personas a tu lado - la chica continuó con la "Oración" - aquí y ahora... - Estuvo a punto de decir "Amén" cuando otra voz femenina interrumpió.
- Ya callense - pidió la chica a su lado, Min observó a su novia sin entender el porqué de su repentina molestia "Ya ...¿O le hablas a él?" preguntó la de piercing - a los tres - dijo sin mirarla, Park quiso agarrar su mano nuevamente pero ella la apartó, carajo, Kang Sae-byeok estaba celosa. El ascensor se detuvo y de a poco los jugadores comenzaron a salir uno tras de otro.
- Oye ¿Cómo te llamas? - pregunto la menor hacia la pelinegra, tenía curiosidad por esa chica "¿Porque quieres saber eso?" - Para hablarte por tu nombre - "No me hables" respondió cortante - que callada - Sae solo pidió en voz baja que la dejara tranquila - tu fuiste quien me habló primero ¿Eh? - sin más la mayor no respondió - Y tu ¿Cual es tu nombre? - dijo hacia la castaña.
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ɪ ᴅᴏɴ'ᴛ ɴᴇᴇᴅ ʏᴏᴜ... ¿ʀɪɢʜᴛ? | Squid Game | Kang Sae-byeok
FanfictionPark Hyung-min una chica intersexual de Corea cansada de vivir una vida vacía y carente de sentido acepta la invitación de jugar una serie de juegos con la esperanza de encontrar aquello que le diera sentido a su vida. Parecía una idea tentadora ¿No...