once.

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Eran las 9 de la mañana y Lalisa se había despertado para hacer el desayuno, cuando escucho los pasos de Jennie unos minutos después de los suyos.

- Buenos días.- saludo sonriente.

- Buenos días.- dijo sentándose en la silla esperando su desayuno.

Después de unos minutos Lalisa le entrego el desayuno. Para después comenzar a hacerse el suyo, ambas estaban en silencio cada una metida en sus pensamientos.

- Hoy iremos a la playa.- rompiendo el silencio, dejando a Lalisa estática unos segundos.

- ¿A la playa?.- Repite creyendo que a escuchado mal.

- Si.- Confirma.- Se que llevas encerrada mucho tiempo y se que te gustara.

- Sera un bonito viaje en pareja.

- ¡Wo! ¡Lalisa están dulce!

Sabía que le estaba subiendo mucho el nivel de amor a Jennie pero así era ganar más terreno, una mejor huida podría escapar, su corazón tiembla ante la idea de separarse de Jennie.

Ella ahora no tiene nada ¿Que tiene? Nada, su piso no es seguro para volver, además seguramente ya tendría otro inquilino, apagado más de un año, económicamente tiene 0 ¿es buena idea precipitarse?

- Bueno realmente iremos a Manila.

- ¿¡Que!?

- No te gusta.

- No, ¡es decir si!

¿El universo le está hablando?

- Además tengo muchos planes para nosotras.

- ¿Qué planes?

- Bueno pues.- y se inclinó hacia su oído apesar de que estaban solas en aquella casa.

-¡AHHHH! ¡Jennie! ¡Luego dices que soy yo la pervertida!

- Tu no te has negado~

- Pe-pero....¡Me voy a hacer la maleta!.- grita levantándose y saliendo de la cocina escuchando la voz de Jennie reír.

Calor sofocante de Manila recae sobre sus cuerpos, pero sin duda Jennie es la más sofocada de las dos, los hombres de la Omega se encargan de llevar sus maletas hasta el lujoso pero sencillo hotel

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Calor sofocante de Manila recae sobre sus cuerpos, pero sin duda Jennie es la más sofocada de las dos, los hombres de la Omega se encargan de llevar sus maletas hasta el lujoso pero sencillo hotel.

- ¿Cómo te encuentras?.- pregunta la Alfa mientras se tumba a su lado guardando la distancia.

- Mal....odio el calor.- la azabache saca su móvil.- Toma ve y compras una granizada el patrón es 12345.

- Oh...vale...- dijo agarrando el teléfono de la contraria.

Una vez fuera de la habitación no ve a nadie camina hacia el lujoso bar, sabe que todavía no es el momento, puede que los hombres de Jennie anden cerca.

- Una granizada, por favor

- ¿De qué?

- Uhm.- Lalisa mira la lista.- De sandía.

- ¿Grande o pequeña?

- Grande.- Después saca el móvil de su bolsillo y lo acerca a la máquina para pagar haciendo un pequeño pi mientras vuelve a la habitación bebe un poco de la granizada.

- Que rica está.- sonriente, saca las llaves de la habitación y entra, se encuentra a Jennie en la misma postura que la dejó.- Toma.- dijo sentándose en la cama.

- ¡Que rica!.- en cuanto toma el primer sorbo.

- A que si.- la Omega asiente y sigue bebiendo.

- ¿Por qué no te has comprado tu una?

- Oh...bueno...no sé.- Entonces se quedan en silencio y después de unos segundos Jennie estira su brazo dándole de su granizada.- Gracias.

El aire acondicionado empezá a llenar la habitación de aire fresco, cosa que hace a Jennie de lo más feliz, haciendo que se revuelque feliz en las sábanas, llenándolas de su olor.

- Sabes esta noche e reservado el jacuzzi.

- ¿Por qué tan tarde?

- Porque por la noche hace más fresco, estas loca si piensas que saldré por la tarde.

- Y...- dijo agachando la cabeza tímidamente.- ¿Podremos ir a la playa también? Aunque sea al atardecer.

- ¡Claro!

- Gracias.- inclinandose a besarla, un beso que Jennie vuelve más largo de lo que debía ser, puede sentirse el sabor de la sandía y el frescor de sus lenguas.

Así pasan la tarde bajo el fresco aire y viendo la televisión, ninguna parece tener ganas de hacer nada, simplemente estar junto a la otra y darse mimos.

- Oye, Lalisa...

- ¿Mmmm?

- ¿Que tal si vamos a comer al restaurante? Hacen una comida muy buena.

- Claro.- acepta mientras se reincorpora.

Ahora si se puede ver a más gente por los pasillos, varias parejas que ríen y se besan, algunas metidas en la piscina ¿La piscina esta abierta 24h? Son las 9:21 ¡El agua debe estar helada! la música que suena por todo el lugar hace que la gente se mueve de maneras diferentes algunos mejor y otros peor, pero ella tampoco es una experta bailando así qué tan poco va a juzgar a nadie.

- Sabes me gustaría comer....

Lalisa escucha a Jennie decir con alegría la comida que le gusta, mientras sus ojos tienen un destelló de alegría, su lobo mueve su cola al ver tanta alegría en la Omega.

ojalá las cosas hubieran sido diferentes

ojalá no me hubieras encerrado

Ojalá no me hubieras hecho tanto daño

Ojalá no hubieras matado a mi amigo.

Si no me hubieras quitado prácticamente todo lo que tenía me quedaría a tu lado, porque realmente y apesar de todo tienes tus cosas buenas.



交  ›  LA ALFA DE JENNIE 𖥻JLDonde viven las historias. Descúbrelo ahora