Capítulo 11
SARA
Desperté totalmente cansada, logré incorporarme en mi cama, me estiré e hice crujir mis huesos, aún sentía cansada de anoche. No sabia en que momento mi hermano se había ido de mi cama, bajé con pereza a la cocina, me encontré a mamá bailando al ritmo de una canción ochentera.
– Buen día Sara –
– Buen día mami – dije mientras me dirigía a la mesa isla, ella puso un plato frente a mi –¿Papá? ¿Mark? –
– Salieron a comprar las cosas para ir a la playa, así que ve a cambiarte –
– Perfecto –
Tome el ultimo trago de mi jugo, subí a mi habitación, busque mi bikini negro, era precioso, adoraba este bikini, me coloque un short y una camiseta, en un pequeño bolso, aliste todo lo que iba a necesitar para la playa.
Sombrero, bronceador, bloqueador, lentes de sol, sandalias, etc. Escuche la puerta de la casa, los pasos de mi hermano en el pasillo, abrió la puerta de golpe y lo mire a través del espejo.
– Hola pequeña ¿Esta lista? –
– Si, vámonos –
Tomo mi bolso de la cama, salí tras de él, me gustaba su trasero, bajé las escaleras y me fui directamente al automóvil, vi a papá terminar de guardar algunas cosas en el maletero. Estaba en el asiento trasero con mi hermano, saque el iPod y le pase uno de los audífonos, Seven Nation Army, estaba en reproducción.
Apoye mi cabeza en su hombro de mi hermano, entrelace nuestros dedos acariciando su palma con mi pulgar, sentía escalofríos recorriéndome, adoraba esta sensación. Mamá y papá hablaban de algo que no llegue a escuchar, Mark veía al horizonte. Me gustaba mucho observarlo. Después de una hora divise la playa, amaba el mar y las olas, aparcamos el automóvil en un lugar con sombra gracias a unas palmeras, no era una playa muy concurrida, menos en días de semana. Ya me había puesto mis sandalias, así que bajé rápidamente, corrí hacia la playa, desde pequeña siempre me había gustado este lugar. A lo lejos escuche la voz de papá diciéndome que no corra, cuando de la nada caí de golpe al suelo, con los brazos de mi hermano rodeándome la cintura.
– ¡No lastimes a tu hermana! –
El grito de mamá se escucho hasta donde estábamos, sonreí y lo empuje, espesamos a rodar en la arena, hasta que quede en su regazo, empecé a pincharlo con mi dedo en su pecho, ambos reíamos mientras se quejaba. Solo sentimos una sombra, cuando levante la vista nuestros padres nos veían divertidos
– Chicos levántense, ya no son niños pequeños para jugar así –
Dijo papá tomando la mano de mamá, ellos siguieron caminando hasta encontrar un lugar perfecto, el brazo de Mark descansaba en mi hombro, acomodamos el pequeño refrigerador portátil, las sombrillas y las toallas, mamá se saco el vestido y papá la camiseta.
– Nosotros iremos al mar –
Mamá entrelazo sus dedos con papá y los vimos alejarse. Saqué de mi bolso el bronceador, empecé a aplicarlo en mis piernas bajo la atenta mirada de mi hermano, le daba un suave masaje, cuando termine de aplicarlo, seguí con mis brazos, mis pechos, mi abdomen. Gire a verlo
– Serias tan amable de aplicarlo en mi espalda por favor –
– Claro princesa, date la vuelta –
Me recosté sobre mi estómago, dándole la espada y dejándole una gran vista de mi trasero
MARK
Coloqué la crema en mis manos, la calenté un poco antes de pasarla por su espalda, la sentí un poco tensa hasta que empecé a darle un masaje, a medida que iba llegando a su espalda baja, también la tensión en mi crecía. Me excitaba ver su trasero redondo frente a mí, bajé hasta su hermoso borde y volví a subir por su columna, quería ser romántico. Apenas terminé ella me regalo una sonrisa, me acomode a su lado y me coloque unos lentes de sol, disfrutando del paisaje. A lo lejos vi a nuestros padres acercase, cuando llegaron hasta nosotros se acomodaron, sacaron la comida de una canasta, estuvimos hablando de cosas triviales, hasta que Sara se aburrió. Ella se puso de pie, amarro algo en su cadera, tomo su sombrero, se coloco sus lentes de sol y estiro su mano hacia a mi
– Mark, vamos a dar un paseo –
– Esta bien –
– No tarden mucho, chicos –
Sara se inclino hacia papá y beso su mejilla mientras asentía, en ese momento vi como un grupo de chicos vieron su trasero, sentí la molestia recorrer mi cuerpo, solo yo puedo verla así, ella me hizo girar y se subió a mi espalda. Ella me dio las indicaciones por donde quería ir, camine un largo tiempo hasta que llegamos a una parte donde no vimos persona, me hizo bajarla y camino hacia el mar, me hizo seguirla hasta detrás de unas enormes rocas. Según te ibas adentrando era como una pequeña cueva, me sentía claustrofóbico, ella tomo asiento en una parte plana, mientras sus piernas seguían en el agua. Me acomode entre ellas y la bese.
– Sabes que eres perfecto ¿No? –
– Solo contigo –
– Te necesito conmigo para siempre –
– Siempre seré tuyo Sara –
– Hagamos el amor ahora –
– ¿En unas rocas? –
– Sera divertido –
Me atrajo a besarla otra vez, ella desato su bikini por la parte superior, dejando que sus hermosos senos quedaran a la vista, bese su cuello, ella olía exquisitamente a coco, repartí besos hasta sus pezones, succione el derecho mientras que con mi mano estimulaba al izquierdo, la recosté y baje la parte inferior de su traje de baño, amaba lo exquisita que era, lamí su clítoris, mientras ella gemía tirando de mi cabello, sentí su orgasmo en mi boca, baje mi traje de baño y mi miembro salió disparado. Lo dirigí a su entrada, entrelace nuestros dedos y entre, bombeaba rápidamente, sabía que no teníamos mucho tiempo, ella llego a un segundo orgasmo impulsándome a mi orgasmo. Salí lentamente de su interior, viendo el semen escurrir de ella, tiré de ella hacia el agua volviéndola a besar
– No sabes cuanto te amo Sara –
– Yo a ti Mark –
Acomodé su ropa, repartiendo besos por su cuerpo, rápidamente subí mi traje de baño, volví a besarla, cuando salimos de la cueva, hacia un poco de frio y era ya un hermoso atardecer. La playa era peligrosa de noche, así que apuramos el paso hasta llegar donde nuestros padres, ellos tenían todo listo, nos cuestionaron porque habíamos tardado tanto, después de unas excusas baratas ayude a papá a llevar todo al automóvil. Le di una sudadera mía a Sara para que no sintiera frio, papá condujo hasta un restaurante de comida rápida, escuchaba la música de Sara, en su gran mayoría era rock alternativo. My passion.
Mamá discutía con papá sobre la cena, mi hermana dormía plácidamente en mi hombro, amaba a mi pequeña, después de pedir la comida lleguemos a casa, tome a mi hermana en brazos y la lleve a su habitación, estaba aferrada a mi cuello, bese su cabeza al dejarla en cama
– Te amo hermano –
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Deseo Prohibido [1° T.P.]
ChickLitLa vida se vuelve un desastre cuando empiezas a amar a la persona que mas daño te hizo, cuando todo explota y se lleva por delante tus planes, sueños y metas. Sabía que el deseo me estaba consumiendo, sabía que me estaban tentando a pecar, sabía qu...