𝕭𝐨𝐧𝐮𝐬

6.1K 303 20
                                    

| B O N U S U N O

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

| B O N U S U N O

eres mi musa desde hace mucho tiempo
me llevas a través de cada noche oscura

(bonus que tiene lugar antes del epílogo)

Con los ojos puestos en su libro, Stella suspiró mientras lo cerraba. Había pasado una hora desde que Theodore debía llegar a casa, y empezaba a preocupar a Stella que su pareja no volviera a casa.

A decir verdad, Granger tenía la impresión de que su relación estaba en crisis desde hacía varias semanas. Theodore llegaba a casa cada vez más tarde, y se había vuelto más distante, como si pasara algo pero no quisiera que Stella lo supiera. Y esto tenía el don de irritar a la morena.

Stella se sobresaltó al escuchar el cierre de la puerta principal y la voz de Theodore. La morena se levantó del sofá y se dirigió hacia la entrada, donde encontró a Theodore con una enorme sonrisa en la cara.

Se acercó a ella y deslizó las manos por sus mejillas para poder colocarle el pelo detrás de la oreja.

—Ve a prepararte, ¿sí?—exclamó Theodore de repente.

—¿A dónde vamos?

Theodore no contestó, no quería contestar. El mago se limitó a sonreír y a besar suavemente los labios de su bruja.

—¿Confías en mí?

—Cuando me miras como un loco, no sé si debo confiar en ti.—dijo Stella con una suave carcajada.

Theodore puso los ojos en blanco y volvió a besar a su pareja antes de dirigirse al salón. La morena arrugó la frente mientras se giraba para ver cómo su mago colocaba su varita en la mesita. Stella decidió seguir la acción que Theodore le había indicado y se fue directamente a su habitación. Había querido pasar una noche a solas con su novio, pero no fue así.

<3

—Theodore, ¿puedo preguntar por qué tengo que mantener esta cinta sobre mis ojos? Es desagradable.—exclamó Stella, arrugando la frente.

—Deja de quejarte,—gruñó Theodore, poniendo los ojos en blanco.—Y mantén esa maldita cinta en tus ojos.—dijo mientras Granger intentaba quitar la cinta.

Stella suspiró y dejó que Nott la llevara a algún sitio. La joven bruja se mordió el labio cuando sintió que los brazos de su amante rodeaban sus piernas para llevarla como a una novia. La morena dejó escapar un hipo de sorpresa pero se dejó llevar por su mago.

—Espérame aquí unos segundos y no te quites la venda, ¿de acuerdo?—dijo Theodore mientras dejaba a la bruja en el suelo.

Ésta puso los ojos en blanco bajo la venda y escuchó al alto hombre moreno marcharse. Stella respiró profundamente y comenzó a desatar su venda. Los ojos de la morena se abrieron de par en par al ver una mesa más que bien puesta, con velas y algunos pétalos de rosa.

¹ 𝐒𝐀𝐅𝐄𝐓𝐘 𝐍𝐄𝐓 | ᵗʰᵉᵒᵈᵒʳᵉ ⁿᵒᵗᵗ ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora