Deidad Dorada: Slime en el Multiverso [Danmachi]

Capítulo 04: ¿Mundo Danmachi?

'Interesante, muy interesante... siendo así como funciona esto realmente, eh.'

*Boing*

Murmuré con expresión de sorpresa y salté como una pelota. Me acariciaba mi larga e inexistente barba blanca con mis inexistentes manos.

Han pasado cinco días desde que llegué a este mundo. Durante ese tiempo, no me quedé de brazos cruzados... ya que no tengo ninguno. Hice todo lo posible para poder controlar mi pequeño y redondo cuerpo. Al final, lo conseguí en unas pocas horas de esfuerzo.

También habían pasado cinco días desde que conseguí ese sistema que, sinceramente, me había sorprendido. Es decir, incluso reencarnarme en un mundo diferente siendo un maldito slime dorado ya era difícil de digerir para mi pobre y limitado cerebro.

¿Quién iba a imaginar que una pantalla que sólo se podía leer en algunas novelas de fantasía iba a aparecer frente a mí aparentemente de la nada? Era algo realmente desconcertante y, al mismo tiempo, emocionante.

Aunque tenía dudas al respecto y al principio pensé que había alguien que quería manipularme en el proceso, después de estudiar detenidamente todas sus funciones y su estilo, parecía que realmente no me pondría en ninguna situación que requiriera mi vida a cambio de nada... por ahora. Después de todo, el futuro es incierto.

Si quería mantener mi pequeña vida redonda, no tenía más remedio que rodar

.. es decir, caminar hacia adelante estando en el presente y hacer todo lo posible para que mi futuro no fuera oscuro.

'Pero hombre, en serio me he reencarnado en este mundo. Ahora me pregunto cómo fueron creados si antes eran sólo una fuente de diversión'.

Con mis pensamientos en otra parte, murmuré para mí mismo y recordé que este mundo no sería tan fácil...

Ya había tomado conciencia de mi ubicación actual y de mi entorno. Todo ello gracias a la opción "Mapa" que incorporaba el misterioso sistema.

Por supuesto, durante este tiempo, también conozco ya este lugar, o más concretamente, este misterioso mundo en el que me he reencarnado en una bola de oro.

Un mundo de estilo medieval donde las espadas y la magia eran comunes en la vida cotidiana. Las diferentes razas que componían este mundo, así como los diferentes y peligrosos monstruos que habitaban cada rincón del mundo.

Así como los llamados aventureros que se inscribían en un gremio de aventureros para ir en busca de una aventura con el fin de hacerse más fuerte y ganar fama.

Aunque en la antigüedad, incluso antes de que los dioses descendieran a este mundo, los monstruos ya existían, y también los seres que luchaban contra ellos sin la protección de los dioses detrás.

'Bastante admirable. Luchar contra los monstruos a costa de tu propia sangre y huesos'.

Sin embargo, ahora los aventureros podían llegar a ser mucho más fuertes que los seres normales. Por supuesto, todo esto no sería posible sin las bendiciones de los dioses acogiendo a sus hijos en sus propias familias.

¡Sí! ¡Dioses! Maldita sea, yo mismo todavía me sorprendo de esto y a veces sigo pensando que todo esto es sólo un sueño y que mañana me despertaré en un hospital sin mis piernas... No, eso sería bastante traumático, soy feliz siendo una patética bola de goma.

'Gracias a los dioses por concederme un cuerpo tan maravilloso'. Agradecí sarcásticamente en mi mente.

Los dioses eran seres más allá de la imaginación de los simples mortales como yo. Eran diferentes a los seres de este mundo, eran existencias de una dimensión diferente, una dimensión más allá del sentido común, donde nadie podía escalar para llegar.