Nathalie estaba en el edificio donde la marca Agreste tiene su sede, había trabajadores corriendo de un lado a otro, papeles por doquier y gente muy estresada.
Al lado suyo estaba Soledad, la hija de Karina, ambas se llevaban muy bien, se querían muchísimo, Soledad admiraba a Nathalie, ella era su ejemplo a seguir, una mujer buena y decidida, si tan solo supiera que era una simple máscara que mostraba al mundo.
─Ya hice todos los arreglos, el señor Agreste no tuvo problema en darte el puesto, este será tu piso, lo único que tienes que hacer es enviar los recados.
─Eres la mejor tía Nathalie─ la abraza ─¿Estas segura que estás bien?
─Si─ sonríe
─Yo te conozco tía, tú no eres así, ¿acaso el tío Dexter te hizo algo?.
─Por favor, ¿que dices?.
─No soy tonta.
─No es lo que crees─ se cruza de brazos ─Ya es hora de que empieces a trabajar, después más tarde vendré por ti y cenamos juntas─ la abraza
Nathalie salió del edificio abordo el auto y regreso a la mansión, allí empezó sus actividades. Ahora se encontraba organizando unos papeles en el archivo que tenía la casa, en ese momento apareció Gabriel, ella se tambalea y casi cae, pero el la toma rápidamente y la apega a su cuerpo.
─Gracias señor─ el no la suelta
─No entiendo cómo alguien te pudo hacer dañó─ la suelta
─Por favor no empiece otra vez.
─Nathalie entiende que no me puedo cruzar de brazos─ se acerca la toma por la muñeca y le baja las mangas de su vestimenta enseñando golpes ─Esto es terrible
─Ya le dije que me caí─ se suelta ─No sea entrometido, lo que pase en mi matrimonio es problema mío
─Ya no Nathalie, debes dejar que alguien te ayude, no es normal que te lastimé, mereces alguien que te cuide, que te respete, que este a tu lado.
─Dexter está a mi lado, me respeta.
─¿Enserio?, entonces no habrá problema de que me acompañes a la semana de la moda en Japón.
─Señor se lo suplico.
─Yo te lo suplico, eres presa de un demonio.
─¡No hable así de el!, me ama, y estuvo a mi lado en mi peor momento, no le voy a permitir.
─No le debes nada─ intervino ─Eres su esposa, pero no le perteneces, tú eres tu propio dueño y nadie te debe quitar éso
─Estoy en control.
─¿Enserio?. . .la escena del otro día en el restaurante me dejó bien en claro que ese hombre es un peligro.
─Vanesa─ musito
─¿Que?.
─Fue Vanesa.
─¿De que hablas?.
─¿Cómo sabía Dexter que yo iba a estar en ese momento con usted?, ¡fue Vanesa!, ¿cómo no me di cuenta?.
─¿Por qué Vanesa haría algo así?.
─¿No se dió cuenta?.
─¿De que debería darme cuenta?.
─¡Vanesa está enamorada de usted!.
─Por favor─ se cruza de brazos ─Esta casada, Brion es amigo mío, Vanesa jamás podría fijarse en mi.
─Debería abrir más sus ojos señor Agreste.
─Somos buenos amigos, nada más, y no desvíes nuestra conversación. . .
─Nuestra conversación está acabada señor, no se meta en mi matrimonio─ toma unas cosas ─Debo ir por Adrien al François
Gabriel se quedó ahí un poco en shock, no podía entender como ella seguía aferrada a ese matrimonio que no tenía ni pies ni cabeza, entendía que podía haber estado enamorada en algún momento, pero ahora, ante los golpes y el maltrato ella debía escapar cuánto antes.
A todo esto, en un café muy famoso de la ciudad, a tan solo unas cuadras de la torre Eiffel, Dexter y Vanesa se encontraban para tener una pequeña charla.
─¿Que querés?─ hablo el en tono despectivo
─Mi amigo, solo quería verte, ¿cómo están las cosas con Nathalie?.
─¿Que te importa?.
─Por esa actitud de neandertal es que un día Nathalie te va a dejar.
─¿Que sabes vos?─ la mira fijo
─La escenita en el restaurante dejo rumores en todos lados, y por supuesto ella es la asistente del hombre más rico, apuesto y poderoso de la ciudad.
─¿Que querés decir?.
─Que si le seguís llegando a tu esposa, no va a dudar en refugiarse entre los brazos de su jefe.
─¡La mato!─ hace una pausa ─¡Y lo mató!
─Que dramático, vos lo que tenés que hacer es comportarte, porque el único responsable de que esos dos estén juntos vas a ser vos, ni ella, ni el.
─¿Y por qué tan interesada?.
─Porque Gabriel es mío.
─¿Y Brion?.
─¿Perdón?.
─Dijiste que Gabriel es tuyo. . .
─¡Claro!, mi amigo.
─Te gusta el diseñador─ sonríe
─¡No!─ lo interrumpió
─Si, te gusta el diseñador y crees que Nathalie es una enemiga, y si crees eso, es pasa algo.
─No, pero si vos te haces el tonto si va a pasar, asíque cállate y escuchame a mi.
─Mira la última vez que te hice caso, me case, asíque habla.
─Tenes que fingir, enamorar a Nathalie, comportarte como en aquellos días de escuela cuando se volvió tu novia, tiene que dejar de tenerte miedo y va a ser completamente tuya, ahora. . .si vos seguís siendo esa bestia que yo conozco muy bien, se va a asustar tanto que va a terminar en los brazos de Gabriel─ bebé café
─No me puedo controlar.
─Vas a tener.
─Me pone mal el tan solo ver qué respira el mismo aire que otro.
─Bueno vas a contar hasta mil cada vez que la vez con otro y te vas a comportar.
─Voy a tratar.
─Tratar no, lo vas a hacer─ se levanta ─Ahora me voy, tengo que ver a Gabriel, vos ahora volve a casa cocina algo rico, y procura hacerle pasar a Nathalie la mejor noche de su vida
─Cuando querés podés Vanesa.
─Ya pague todo, disfrutá.
Dexter queda solo, sonríe, observa como Vanesa se va, viendo cada detalle de sus atributos, se termina el café y se va para su casa, tenía que poner en marcha el plan cuánto antes.
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Miraculous: Engaño
FanfictionGabriel descubre una aterradora verdad, cuando comienza a fijarse en Nathalie