« "-Quizá si seas uno de los cinco complementos del infierno, tal vez eres peligroso para mí, pero a mí todo eso no me importa, mí pequeño Lucero, yo te amo y te cuidaré, aunque tenga que dar mi vida por ello." »
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• No hacer adaptaciones...
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Lucero suspiró, observando a Minho con algo de vergüenza. -Honey, ¿Qué haces aquí?
-Hyunjin me trajo para preguntarle a Lucero dónde te encontrabas. No sabes lo preocupado que estaba por tí, Sungie.
Minho le habló muy rápidamente, para después acercarse lo más posible al castaño, acunando su rostro entre sus manos.
-¿Qué haces tú aquí?
-Minho, yo soy Lucero.
Y la noticia le cayó como un balde de agua fría. Desde que Jisung se lo había negado aquella noche, había quedado totalmente seguro de que era pura coincidencia; pero no, ahí estaba, enamorado del mismísimo príncipe del infierno, si su abuela se entrará lo mataría.
-¿Cómo...
-Lamento habértelo ocultado, pero era peligroso revelarlo.- Pasó sus manos por todo su rostro en señal de frustración, dándose la vuelta para caminar dentro de la oficina.
-¿Peligroso para quién? ¿Por q..
Se quedó con las palabras en la boca cuando dentro de aquella habitación logró visualizar a su hermano y a Ni ki, haciéndole más grande el lío mental que tenía.
-¿Seungmin...? ¿Ni ki..?
De pronto Minho sintió un dolor de cabeza extremadamente fuerte, haciéndolo desmayarse casi al instante. Se despertó tiempo después, en una habitación desconocida y pudo percibir a Jisung, bueno, Lucero apoyado en la pared.
-¿Sungie..?
-¡Honey! Oh diablos, ya despertaste. ¿Estás bien?
Corrió preocupado a sentarse junto a Minho, acunando su rostro para verificar que el chico no tuviera fiebre. Al no estar acostumbrado al aire contaminado del infierno, le provocó un desmayo.
-Lo estoy, yo.. necesito que me expliques que hacían Ni ki y mi hermano aquí.
Hanlu suspiró. -Ni ki es Jesús, el hijo de Bin, y Seungmin es un vampiro que está comprometido con Ni ki.
Minho abrió los ojos como platos. -¿¡Seungmin vampiro!? ¡Pero él no siquiera creé en lo sobrenatural!
-Calma, amor, déjame explicarte bien, pero por favor tómalo con tranquilidad.- tomó las dos manos de su amado.- Seungmin no es drogadicto ni alcohólico, las veces que llegaba tarde a casa era porque estaba aquí, con Ni ki. Su aspecto moribundo se debe a que fué mordido por un vampiro hace dos años, se excusó en las drogas para no levantar sospechas. Conoció a Jesús cuando sus padres murieron, él estuvo para Seungmin más que cualquiera, por ello se conocen tanto.
Los ojos de Minho se llenaron de lágrimas, el enojo lo consumió por completo y no pudo hacer más que empujar a Jisung lejos con toda su fuerza, cubriendo su rostro, tenía mucho miedo, toda su vida era una mentira.
-Aléjate de mí, tú y todo lo que tenga que ver con ésto.
Dijo tartamudeando, estaba temblando. Los ojos de Jisung se humedecieron y su corazón dolió, pero asintió.
-Ven, te llevaré a casa y no volveré a aparecerme en tu vida.- soltó con sinceridad, extendiendo su mano.
Minho se levantó y tomó la mano de Lucero, lo único que pudo hacer fué abrazarlo. Hanlu fué débil y correspondió el abrazo, apretando a Minho con fuerza contra su pecho.
